Bogotá, Colombia.- La Misión de la ONU en Colombia confirmó hoy el inicio del proceso de verificación de entrega de armas de las FARC, parte de la implementación del acuerdo de paz firmado por esa guerrilla y el Gobierno.
El Alto Comisionado para la Paz de Colombia, Sergio Jaramillo, confirmó ayer en una declaración a la prensa que este día comenzarán las FARC a ceder sus armas, hecho que la guerrilla ratificó.
La Misión agregó que como primera medida en este proceso de almacenamiento gradual, recibirá las armas de los miembros de las FARC que forman parte del Mecanismo de Monitoreo y Verificación (MMV), que son aproximadamente 320 guerrilleros.
Según los planes, el 1 de marzo las FARC deben comenzar a entregar el 30 por ciento de su armamento, el 1 de mayo otro 30 y el 40 restante el 1 de junio, día en que debe concluir el periodo de 180 días para la destrucción armamento inestable como municiones, minas y explosivos.
“Se trata de un avance parcial pero sustantivo en el proceso de dejación de armas, que la Misión valora como un buen punto de partida hacia la superación de los atrasos en la implementación”, comentó Jaramillo.
Los observadores de la ONU agregaron en el comunicado que acogen con beneplácito el consenso de las partes de iniciar sin más demora el proceso, a pesar de los retos logísticos que dificultan el desarrollo de la implementación del Acuerdo sobre el Cese del Fuego y de Hostilidades Bilateral y Definitivo y Dejación de Armas.
Además precisó que grupos de observadores empezarán a trasladarse a los campamentos de las FARC, para lo cual cuentan con 450 personas que harán monitoreo continuo de las armas registradas, que posteriormente serán destruidas por la ONU.
En paralelo y “en coordinación con las FARC, la Misión empezará de inmediato el proceso de planeación y verificación de la destrucción del armamento inestable, como municiones, minas y explosivos”.
La Misión de la ONU se mostró confiada en que el proceso de implementación del acuerdo de paz se puede acelerar lo cual inspirará confianza a los actores del conflicto y a toda la sociedad colombiana.
Fuente: Reforma
