Se sumaron grupos feministas y madres de desaparecidas
Nos queremos vivas, dijeron ayer las mujeres en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Cientos de estudiantes, ellas al frente, marcharon en Ciudad Universitaria, no sólo en demanda del esclarecimiento de la muerte de Lesvy Berlín Osorio Martínez, de 22 años, cuyo cuerpo fue encontrado en el campus el miércoles, sino porque
en México no se puede permitir ni un solo feminicidio más.
Hubo enojo, llanto e indignación, pero sobre todo una exigencia:
Ni una asesinada más, ni una muerta más. Las alumnas, con académicas y trabajadoras universitarias, se reunieron en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales con representantes de organizaciones feministas y madres que buscan a sus hijas desaparecidas. Todas marcharon hacia la rectoría de la UNAM.
Detrás de ellas iban universitarios, que exigían castigar toda clase de violencia de género. En carteles, ellos y ellas demandaban justicia para Lesvy.
Camino a la rectoría se detuvieron en la caseta telefónica donde fue hallado el cuerpo sin vida de Lesvy. Algunos dejaron flores, leyeron poemas y pidieron guardar un minuto de silencio. Norma Andrade, fundadora de Nuestras Hijas de Regreso a Casa y madre de una joven víctima de feminicidio, pidió que no se impusiera el silencio.
No, un minuto de silencio no, señaló Andrade. “No nos callen más, déjennos gritar. Varones, cierren los ojos, piensen en las mujeres más cercanas a ustedes, en su mamá, en su hija, para que sientan cómo nos sentimos. No esperen a estar en nuestros zapatos para gritar con nosotras: ‘Ni una más, ¡ya basta!’”
En la explanada de rectoría, la madre de Lesvy, Aracely Osorio, dijo que su hija quería ser una ciudadana del mundo.
No fue suicidio, fue feminicidioy
No está sola, decían los manifestantes, cuya solidaridad agradeció Osorio.
Alumnos del Colegio de Ciencias y Humanidades Sur, donde Lesvy estudió, pidieron seguridad en el campus y repudiaron el crimen.
Fuera asesinos de la UNAM, coreaban muchos.
Antes de la manifestación, varios grupos emitieron comunicados en los que se sumaron a la exigencia de justica. La comunidad académica del Centro de Investigaciones y Estudios de Género de la UNAM repudió la muerte violenta de la joven y sostuvo que es fundamental el reconocimiento del feminicidio
como fenómeno actual que tiene gravísimas repercusiones en la vida de las mujeres y destruye el tejido social.
Miembros de la Coordinadora de Estudiantes Universitarios dijeron que la muerte de Lesvy
evidencia el fracaso de las medidas de prevención y seguridad impulsadas por el rector Enrique Graue.
Al finalizar el mitin, un centenar de manifestantes bloquearon por 40 minutos los dos sentidos de Avenida de los Insurgentes.
Por la noche, las autoridades universitarias emitieron un comunicado en el que señalaron que
la UNAM comparte la indignación expresada hoy por sectores de la comunidad universitariay se pronunciaron por justicia expedita para Lesvy.
No era alcohólica ni drogadicta ni cuidaperros, señala la madre
Mi hija no era alcohólica ni drogadicta ni cuidaperros, aseguró ayer Aracely Osorio, madre de Lesvy Berlín Osorio Martínez, cuya muerte indigna a la comunidad de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
La señora Osorio estuvo ayer en la explanada de rectoría, en Ciudad Universitaria, donde estudiantes, académicas e integrantes de organizaciones feministas efectuaron un mitin, luego de marchar por el campus, para exigir que se haga justicia a la víctima.
Aracely Osorio, trabajadora de la UNAM, se dijo indignada porque en varios mensajes la procuraduría de justicia capitalina señaló a Lesvy de alcohólica, consumidora de drogas y mala estudiante.
De ninguna manera vamos a permitir que se estigmatice a nuestra hija, sostuvo enérgica.
Querían culparla de su muerte, pero el dictamen pericial indica que murió por asfixia.
Acompañada por el padre de la joven, Aracely aseveró que
por decisión propia, mi hija optó por dejar un momento la escuela para dedicarse a trabajar; se separó de nosotros para vivir con su compañero. Yo creo que eso no la convierte en un ser despreciable, como pareciera que quieren hacerla a ella y a muchas mujeres que toman decisiones porque tienen la capacidad de hacerlo.
Cuando Lesvy Berlín –sus nombres de pila– fue hallada en Ciudad Universitaria, llevaba una correa en la mano. “Era de su perro, Yumaikol, al que quería mucho”, explicó Aracely. A la joven le gustaban las lenguas y era gran lectora, añadió su madre.
Retira procuraduría de la CDMX tuits sobre la joven hallada en CU
Generaron una ola de indignación contra la dependencia
La difusión de los mensajes de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México sobre la investigación iniciada por el homicidio de Lesvy Berlín Osorio Martínez, quien fue hallada muerta el miércoles en Ciudad Universitaria, generó severas críticas contra la dependencia, por lo cual el procurador capitalino, Rodolfo Ríos Garza, tuvo que corregir el
errorpor los tuits
inapropiadosde la oficina de comunicación social y mandó retirarlos.
En su cuenta @PGJDF_CDMX, la procuraduría informó que la joven, de 22 años, no estudiaba, debía materias, bebía alcohol, consumía drogas y vivía en concubinato, lo cual causó indignación y la creación del hashtag #SiMeMatan qué dirían de mí.
Los diversos usuarios de las redes sociales han mencionado la acusación que lanzaría en su contra la procuraduría capitalina para justificar su respectiva muerte, antes de realizar una investigación. En su propia cuenta de Twitter, Ríos Garza señaló que
jamás la conducta, la vida privada o la condición social afectará una investigación.
Añadió que instruyó
rectificar el errory ordenó que
se retiren de inmediato, por ser contrarios a los protocolos de actuación de la dependencia.
Sin pruebas contra el novio
Por otra parte, tras el análisis de los videos de seguridad que presentó la Universidad Nacional Autónoma de México, se corroboró que horas antes de su muerte, Lesvy y su novio estuvieron juntos. La cámara los capta al momento de discutir, se ven manoteos y posteriormente toman caminos diferentes.
A pesar de que el joven regresó al punto donde la cámara lo captó junto a la muchacha, no se encontraron pruebas sobre su presunta responsabilidad en la muerte. El Ministerio Público concluyó la entrevista y permitió que se retirara de la agencia, se informó.
No obstante, las indagatorias continúan sobre dos líneas: el feminicidio y el suicidio que pudo cometer la joven tras la pelea que sostuvo con su pareja. Ayer el cuerpo de Lesvy fue entregado a su madre, luego de que se concluyeron los estudios que se realizaron en el Instituto de Ciencias Forenses.
En tanto, la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal abrió dos quejas de oficio contra la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México en la primera y cuarta visitadurías generales.
Las querellas son por la filtración de información y la aplicación del protocolo de feminicidio. El organismo solicitó a la procuraduría que se garantice el debido proceso y se investigue quién realizo las filtraciones de la carpeta de investigación.
Fuente: La Jornada