El titular de Obras, Èdgar Tungüí, descarta que se vaya a detener; se modificaría trazo
El proyecto no cuenta con estudio de impacto ni autorizaciones de INAH e INBA, señalan
La Academia Mexicana de Derecho Ambiental interpuso ayer una solicitud de amparo en el juzgado federal octavo de distrito en materia administrativa en contra de la construcción de la línea 7 del Metrobús, en Paseo de la Reforma. Sin embargo, el secretario de Obras y Servicios, Édgar Tungüí, afirmo que
en principio no corre ningún riesgode que se detenga, aunque no descartó que se pueda modificar el proyecto de la ruta.
Rolando Cañas, presidente de AMDA, explicó que el juzgado cuenta con un máximo de 30 días para declarar una suspensión provisional, tiempo en el que se buscará que la Suprema Corte de Justicia de la Nación atraiga este caso, pues el proyecto no cuenta con una evaluación de impacto ambiental, estudios técnicos, autorizaciones del INAH e INBA, ni se consultó a la población.
Además impactará un área de valor ambiental en la primera sección del Bosque de Chapultepec, a la altura de la Glorieta de Petróleos para construir un centro de transferencia del servicio troncal que viene de Indios Verdes hacia un alimentador a Santa Fe; e incluye el derribo de 640 árboles.
Diana Ponce Nava, ex Procuradora Ambiental y del Ordenamiento Territorial, explicó que el gobierno capitalino no tiene facultades para aprobar este corredor, pues Paseo de la Reforma es un bien de dominio público federal, por lo que en 2005 se logró echar atrás el ReformaBús; e impactará de manera negativa a 100 monumentos históricos y artísticos.
Se trata de una puñalada de la administración capitalina, pero les va a fallar su línea Dorada, que es un vulgar negocio crematístico, que reducirá la velocidad de 17 kilómetros, generará más tráfico al reducir un carril y elevará los casos de contingencia ambiental, sin considerar que viola el acuerdo paralelo del Tratado de Libre Comercio, afirmó a su vez, Ramón Ojeda, fundador de la AMDA.
Al respecto, el secretario de Obras aclaró que la construcción de la línea cuenta con todos los permisos, incluidos los del INAH, y junto con el director del instituto, Diego Prieto, realizó un recorrido por los trabajos con un avance de 37 por ciento para revisar el proceso constructivo, los puntos históricos que se tienen que cuidar y el sistema de estaciones.
Al dar a conocer la convocatoria para el Premio de Ingeniería Ciudad de México 2017, no descartó se pueda modificar el proyecto de la ruta, especialmente en la zona de la Fuente de Petróleos, que ha causado la inconformidad de vecinos de Polanco,
Comentó que sostiene pláticas con el director del Metrobús, Guillermo Calderón, para revisar las opciones y hacer el ajuste si es que éste procede, y reiteró que la línea se concluirá en octubre.
Por su parte, Jesús Padilla, de la empresa skybus, una de las dos operadores de la nueva línea, explicó que a finales de mes se tendrán los primeros seis de 90 autobuses de dos pisos, con una inversión de mil 100 millones de pesos y que transportarán a cien mil usuarios diarios, a los que se sumarán 30 mil del servicio alimentador con 18 autobuses.
Fuente: La Jornada