La exministra Olga Sánchez Cordero, nominada por el virtual ganador de la presidencia Andrés Manuel López Obrador para dirigir la Secretaría de Gobernación en su próximo gobierno, afirmó que ya está esbozado el proyecto sobre la amnistía, misma que se traducirá en una iniciativa de ley sobre la que el Congreso tendrá la última palabra.
Se trata, dijo, de un tema de justicia social además de que no es la primera vez que se expiden leyes de amnistía, pues ya se hizo con el levantamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).
Entrevistada en el programa Despierta con Carlos Loret de Mola, Sánchez Cordero, explicó que la ley de amnistía debe tomar en cuenta hechos del pasado y determinar qué periodo del pasado se toma en cuenta. Asimismo, dijo, debe establecer el universo de personas a quienes será dirigida y las hipótesis legales muy claramente sobre quiénes entran en cada lineamiento.
En este último caso, precisó que México ha firmado convenciones internacionales que evitan establecer leyes de amnistía que incluyan delitos de lesa humanidad, tortura, homicidio, violación, trata de personas, secuestro y desapariciones.
Respecto del periodo que abarcaría la ley de amnistía, refirió que posiblemente sería del 1 de diciembre de 2006, cuando Felipe Calderón llevó al Ejército a las calles, hasta 2018.
Y en cuanto a los que podrían verse beneficiados con esta ley mencionó probables responsables de delitos contra la salud, como campesinos que siembran droga o narcomenudistas.
Cuestionada sobre si capos o líderes criminales podrían acceder a algún tipo de amnistía, como Joaquín “El Chapo” Guzmán, Sánchez Cordero respondió que no se aplicaría en delitos graves, pero sí podrían acceder a reducción de penas en otros delitos a cambio de información.
Sobre esto último dijo que se aplicaría, por ejemplo, en caso de que un informante que ofrezca datos ciertos, cotejables y precisos, en un caso de personas desaparecidas.
Incluso, refirió que algunos familiares de víctimas de desaparición, le han confiado que están dispuestos a perdonar o no exigir reclusión contra quien les diga dónde está su familiar.
En caso de que algunos familiares de víctimas se opongan a cualquier tipo de amnistía o reducción de penas, la exministra explicó que se plantean consultas, como lo ha instruido López Obrador.
Sánchez cordero explicó que al igual que España tras el fin del régimen franquista, se considera un modelo de justicia transicional para pasar de un esquema de violencia a uno de pacificación y se tendrían que garantizar los derechos de las víctimas.
Estos derechos son: el derecho a la verdad, saber qué pasó con su familiar y cómo murió; el derecho a la justicia, que los responsables respondan antes instancias judiciales; el derecho a la reparación y mecanismos de no repetición.
La exministra también reveló que planea presentar una iniciativa de ley para despenalizar la mariguana y posiblemente también la amapola, pero para la venta a empresas farmacéuticas. Sobre este tema, aclaró, López Obrador también consideraría consultas con expertos.
Añadió que mientras Canadá y varios estados de la Unión Americana han avanzado hacia la tendencia de la legalización, “nosotros nos estamos matando”.
Fuente: Proceso