Miami, Estados Unidos.- El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó desde Miami un decreto con el que suspende unilateralmente el acuerdo de la Administración pasada con Cuba.
“Estoy cancelando todo el acuerdo unilateral del último Gobierno. Estoy anunciando hoy una nueva política, como prometí durante la campaña.
“Nuestra política buscará el mejor acuerdo para el pueblo cubano y el de Estados Unidos. No queremos dar impulso a un monopolio que abusa de los ciudadanos cubanos”, anunció Trump previo a la firma durante su discurso sobre las nuevas políticas.
Las nuevas normas incluyen una prohibición a operaciones financieras entre estadounidenses y compañías cubanas afiliadas a los servicios militares o de inteligencia del país.
Las medidas también impiden a individuos planear sus propios viajes educativos a la Isla fuera de grupos turísticos y establece nuevas restricciones sobre dónde pueden gastar su dinero.
Es probable que estas medidas tengan un impacto significativo en los viajeros estadounidenses debido al papel dominante en la economía cubana del Grupo de Administración Empresarial SA, conocido como GAESA, un conglomerado estatal afiliado al Ejército.
El conglomerado es propietario de casi la totalidad de las cadenas minoristas en Cuba y de 57 hoteles de la Isla, principalmente operados por firmas internacionales.
“Nuestro acuerdo empieza por aplicar la ley de Estados Unidos. No levantaremos las sanciones a Cuba hasta que estén libres todos los presos políticos, hasta que se respete toda la libertad, hasta que legalicen a todos los partidos políticos y, por último, hasta que tengan elecciones libres y supervisadas a nivel internacional”, indicó Trump, en alusión a las condiciones de su Administración para firmar un nuevo acuerdo con la Isla.
“Registraremos los dólares estadounidenses que vayan a los militares y servicios de inteligencia, que son el núcleo del régimen de Castro. Aplicaremos la restricción sobre el turismo, mantendremos el embargo, y veremos que las inversiones vayan directamente al pueblo y éste pueda construir el futuro de su país, un país de gran potencial. Los cambios de Trump, no obstante, no tocan la anulación de la política de “pies secos, pies mojados”, ni tampoco la reapertura de Embajadas.
“Mantendremos la salvaguarda para impedir que los cubanos arriesguen sus vidas para llegar ilegalmente a este país. Tenemos que hacerlo, no tenemos opción, y trabajaremos por el día en que una nueva generación de líderes ponga fin a este largo régimen de sufrimiento.
“Desafiamos a Cuba a volver a la mesa para un acuerdo que esté en el mejor interés de nuestro pueblo, el pueblo cubano, y de los cubanoestadounidenses”, aseguró.
Fuente: Reforma