El ayuntamiento de Empalme clausuró de forma temporal dos plantas de ciclo combinado de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), inauguradas el pasado 16 de agosto por el presidente Enrique Peña Nieto, por falta de pago de permisos de construcción, licencias de uso de suelo y solicitud de renovación ambiental integral.
En conferencia de prensa, el alcalde priísta Carlos Enrique Gómez Cota dio a conocer que al gobierno federal, encargado de la obra, se le reclama el pago de 242 millones de pesos que adeudan las empresas Senermex, Dunor y CFE-Acciona.
Detalló que estas constructoras sólo han pagado permisos y licencias de obra civil, que ascienden a 13.5 millones de pesos, cuando la licitación de ambas plantas de ciclo combinado fue por más de 700 millones de dólares, según el Diario Oficial de la Federación.
Indicó que la madrugada del miércoles 80 policías municipales fueron enviados a las playas del Cochorit para impedir el paso a centenares de trabajadores de la construcción y sólo dejaron entrar a empleados de CFE cuya labor es indispensable para la seguridad de las instalaciones.
El ayuntamiento de Empalme exige el cumplimiento de la ley. Ninguna empresa, nacional o transnacional, va a omitir el pago de permisos y licencias. Se han brindado facilidades para que las empresas se regularicen, pero se han negado a cumplir el ordenamiento municipal, añadió.
Reiteró que la suspensión de las obras continuará hasta que se cubran los adeudos. Fuera quedaron cientos de empleados, así como 50 camiones y 20 unidades de maquinaria pesada.
El pasado 17 de agosto el Presidente puso en operación en forma simultánea la planta de ciclo combinado de la CFE Agua Prieta 2 y la conversión de la central termoeléctrica Puerto Libertad, a fin de iniciar el periodo de pruebas de la planta generadora de ciclo combinado Empalme 1 y la construcción de una planta similar contigua denominada Empalme II.
En su quinto Informe de Gobierno, Peña Nieto presumió como un logro de su sexenio que ambas plantas dotarán de energía eléctrica a 12 millones de mexicanos en Sonora y Sinaloa, con una inversión de 33 mil millones de pesos.
Fuente: La Jornada