Ciudad de México. El Partido Revolucionario Institucional (PRI) anunció una iniciativa de reforma a la Constitución para terminar con el financiamiento público a los partidos, a partir de 2018, y eliminar los diputados federales y senadores de representación proporcional, medidas que –aseguró- permitirían un ahorro de 18 mil 400 millones de pesos, que se destinarían a la reconstrucción por los terremotos.
Para el PRI, el sistema político mexicano ha madurado lo suficiente para volver al esquema de financiamiento privado, mediante aportaciones de simpatizantes y militantes, y evitar así que “el peso de las campañas gravite sobre la población”.
También confirmó que hoy entregará al Instituto Nacional Electoral (INE) la carta de renuncia al total del financiamiento que le correspondería en lo que resta del año y convocó a los otros partidos a asumir una decisión similar que, dijo el presidente del tricolor, Enrique Ochoa Reza, sumaría casi mil millones para las familias damnificadas.
“Invitamos de manera respetuosa a todos los partidos a que lleven a cabo la misma acción hoy, de manera puntual, como un compromiso con las familias” que perdieron sus viviendas, dijo en conferencia de prensa en la Cámara de Diputados, que mañana regresará a sus actividades ordinarias.
En una tabla que presentó a los medios, Ochoa Reza dijo que el PRI no recibirá 258 millones de pesos que le corresponden como financiamiento en el último tramo del año. Al renunciar a esos recursos, explicó, no aplica el requisito legal de que el gasto para los partidos no puede tener otro destino y el Instituto Nacional Electoral deberá reintegrarlos a la Tesorería de la Federación.
Al PAN le corresponden 190 millones, al PRD 113 millones, a Morena 95 millones, al PVEM 84 millones, a MC 78 millones, al Panal 60 millones y al PT 54 millones.
El coordinador del PRI en la Cámara de Diputados, César Camacho Quiroz, dijo que él presentará la iniciativa de reforma constitucional en la sesión ordinaria de mañana, para eliminar los 200 diputados federales y 64 senadores pluris, y 438 diputados locales por la misma vía.
“Esto representaría un ahorro de 11 mil 600 millones de pesos, recursos que tendrían como destino el esfuerzo de la reconstrucción nacional”, dijo por su parte Ochoa Reza.
Asimismo, el coordinador priísta expuso que para evitar la intervención del crimen organizado o de intereses económicos y empresariales en las campañas, cada aportación tendría que realizarse a través de los bancos.
“Ha llegado el momento de quitar el financiamiento público y que los partidos se sujeten a las aportaciones de sus militantes y simpatizantes”, indicó.
De esta manera, dijo, se eliminaría del proyecto de presupuesto 2018 el gasto de 6 mil 800 millones de pesos previsto para 2018 a las actividades ordinarias en la campaña presidencial.
Ochoa Reza, Camacho Quiroz y el coordinador de los senadores priístas, Emilio Gamboa Patrón, convocaron a los otros partidos en el Congreso de la Unión a analizar su propuesta y aprobarla cuanto antes, incluso con la dispensa de todos los trámites parlamentarios, para que esté aprobada antes del 15 de noviembre, cuando debe votarse el presupuesto de egresos del próximo año.
Fuente: La Jornada