domingo, 31 de enero de 2016

El PRI hace su líder en Veracruz a exprocurador que entrampó casos de periodistas asesinados

El extitular de la PGJ Veracruz, Amadeo Flores y el gobernador 
de Veracruz, Javier Duarte. Foto: Rubén Espinosa

XALAPA, Ver.- Amadeo Flores Espinoza, exprocurador general de Justicia a mitad del sexenio de Javier Duarte de Ochoa, fue nombrado este domingo nuevo presidente del Comité Directivo Estatal del PRI en Veracruz.

Flores Espinoza ocupó el cargo de titular de la PGJE en el 2012 y 2013, año en el que fueron asesinados seis periodistas en la entidad y ningún caso pudo resolver, entre ellos, el de la corresponsal de Proceso en Veracruz, Regina Martínez Pérez, el cual lleva mil 733 días de impunidad.

En su discurso de unción, Amadeo Flores aseguró que el PRI en las próximas elecciones gubernamentales va de “frente al ciudadano” y con “la cara y las manos limpias”.

Ante consejeros estatales del partido y más de mil simpatizantes en el jardín del hotel Fiesta Americana en Xalapa, Flores Espinoza señaló:

“Este PRI usará la verdad como bandera, no habrá promesas que no se cumplan, nuestro partido reconoce agravios cometidos (sic) y justos reclamos”, dijo.

Amadeo Flores prometió dejar la “política de escritorio” y salir a las calles para junto con la militancia consensuar las “decisiones del partido”.

Hizo énfasis en que en Veracruz habrá un PRI de “inclusión” y de “oportunidades”.

La toma de protesta careció de la asistencia de los políticos afines al gobierno de Javier Duarte, quienes se encuentran confrontados con el actual “candidato virtual” Héctor Yunes Landa.

Del grupo en el poder apenas asistió el líder estatal saliente y legislador federal, Alberto Silva; el líder de la CNC y “amigo de Duarte”, Juan Carlos Molina; y el legislador federal y exsecretario de Gobierno, Erick Lagos. El resto de invitados especiales pertenecían a políticos del PRI ligados con el exgobernador Fidel Herrera o con Yunes Landa.

Con Flores Espinosa como fiscal, el gobierno de Duarte entrampó las investigaciones de los asesinatos de los periodistas Regina Martínez (28/04/12), Víctor Manuel Báez Chino (14/06/12) y Gregorio Goyo Jiménez (11/02/14), en el caso de los homicidios de Gabriel Huge, Guillermo Luna y Esteban Rodríguez (03/05/12), la Procuraduría ni siquiera quiso investigar y se limitó a dar vista a la PGR.

En febrero del 2014 y tras conocerse el asesinato de Goyo, reportero de Notisur y Liberal del Sur y con la presión de la prensa nacional encima, Duarte tuvo que pedirle la renuncia a Amadeo Flores.

Durante los siguientes 15 meses, el hoy líder estatal priista tuvo que refugiarse en un cargo menor administrativo de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu). Ahí duró hasta que fue nombrada titular Rosario Robles.

Sin empleo durante el último del semestre del 2015, Amadeo Flores fue reactivado por el actual “candidato virtual” priista a la gubernatura, el senador con licencia Hector Yunes para tomar las riendas del próximo proceso electoral bautizado como “minigubernatura” porque sólo durará dos años.

En la investigación estancada del homicidio de Regina Martínez, al igual que Flores Espinosa, todos los servidores públicos que tuvieron relación con el expediente del homicidio de Regina Martínez fueron premiados como magistrados del Tribunal Superior de Justicia. Tal es el caso de la juez que conoció el expediente, Beatriz Rivera Hernández; el subprocurador general de Justicia, Marco Antonio Lezama Moo y hasta el hijo de Amadeo Flores alcanzó magistratura.

El expediente de Regina Martínez también causó diversas remociones: la directora de Investigaciones Ministeriales, Consuelo Lagunas, fue enviada a una área de más bajo perfil en la Fiscalía General del Estado (FGE) y el magistrado que liberó a El Silva, Edel Álvarez Peña –exlíder estatal priista– fue cambiado de sala penal.

Fuente: Proceso| NOÉ ZAVALETA