San Salvador Atenco, Méx. Más de 200 representantes de 70 organizaciones del país participan en el Encuentro y Jornadas Nacionales en Defensa de la Tierra, el Agua y La Vida que se lleva a cabo en la explanada de San Salvador Atenco. Los participantes acordaron emprender una lucha unida de resistencia en contra del despojo de los recursos de la nación; iniciativa que promueven la iniciativa privada trasnacional y nacional, a través de las reformas estructurales aprobadas por el Congreso de la Unión.
Provenientes de la Parota, Guerrero; Cherán, Michoacán; Zautla, Puebla, de San Luis Potosí; Chihuahua; del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME); Sin Maíz No Hay País y el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) de Atenco; entre otros, participaron en el foro.
Rosario Cobo "La Chaca" de la organización Sin Maíz No Hay País advirtió que el gobierno federal y los legisladores han puesto en riesgo la vida social del campo y la ciudad, con sus reformas educativa, laboral, de comunicaciones, hacendaria y energética.
Bernardino, Felipe Álvarez y Adán Espinoza del FPDT, denunciaron que el gobierno federal incrementó la presión a través de una nueva estrategia para despojarlos de sus tierras, para la construcción del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México.
Ahora, dijeron, infiltraron gente entre los habitantes para generar conatos de violencia entre los propios pobladores y poder justificar un nueva incursión policíaca, "pero no vamos a caer en provocaciones, porque la lucha no es contra nuestra gente; la lucha es contra el gobierno que a toda costa quiere exterminarnos para construir su aeropuerto".
Por ello, este sábado y domingo celebran la primera asamblea nacional, donde los integrantes de las organizaciones sindicales, campesinas, ambientalistas y sociales, participan en el foro y en mesas de trabajo donde están discutiendo las medidas de la nueva campaña que llevarán a cabo para defender los recursos, patrimonio de sus comunidades y del país.
En las mesas de diálogo, los participantes abordaron temas como el despojo, la autonomía de los pueblos, soberanía alimentaria, la seguridad, producción y consumo, energía y naturaleza, entre otros puntos.
Fuente: La Jornada| Por René Ramón