Previendo que en 10 años se jubilará 50 por ciento de la plantilla laboral y que la formación de un ingeniero lleva entre 10 y 15 años, Pemex acelera la formación de nuevos recursos humanos.
La jubilación del 50 por ciento de la plantilla laboral de Petróleos Mexicanos en 10 años, el riesgo de que el personal especializado migre a otras petroleras con la apertura del sector y el hecho de que, aproximadamente, 23 por ciento de la plantilla laboral de Pemex trabaje en las diferentes áreas de mantenimiento, provocaron que Pemex acelere la operación de la Universidad Corporativa de Pemex.
Eduardo Segovia, de la subdirección de Recursos Humanos y Relaciones laborales explicó a MILENIO que la formación de un ingeniero lleva entre 10 y 15 años; pero considerando estos tres factores es que se debe acortar el tiempo de capacitación.
¿Quiénes tienen acceso a la Universidad de Pemex?
Únicamente personal de Petróleos Mexicanos. La primera etapa está enfocada en la especialización de los 14 tipos de mantenimiento y en comercialización.
Se eligió estás áreas porque son transversales. Todas las subsidiarias tienen área de mantenimiento y comercialización de productos.
¿Por qué eligieron únicamente mantenimiento y comercialización?
En mantenimiento es donde tenemos más población, son aproximadamente 33 mil personas; de éstos, 3 mil son de confianza y 30 mil sindicalizados. Así le pegamos a una gran población de Pemex.
Buscaremos instituciones de certificación internacional para reconocer el trabo del personal que decida incursionar a la universidad. Este trabajo tenemos que hacerlo de manera acelerada, pronto habrá jubilaciones y nueva gente debe ocupar los lugares de mando.
¿De dónde son los instructores que laboran en la Universidad de Pemex?
Nos vamos a apoyar del mejor personal que está en activo porque hay situaciones muy específicas que sólo se aprenden en Pemex.
Con la operación de la universidad se abren oportunidades para los jubilados, podemos aprovechar toda su experiencia.
También recurriremos a otras instituciones para generar las mejores condiciones de aprendizaje.
¿Con la certificación existe el riego de que el personal de Pemex migre a otras empresas?
Como parte de la reestructuración Pemex debe asegurarse de que los recursos humanos certificados serán reconocidos y garantizarles oportunidades económicas y de crecimiento.
Hay situaciones muy específicas que sólo ocurren en Pemex. Por ejemplo, cuando falló el suministro de gas en Burgos, le pegó a toda la cadena de valor. Tenemos un centro de casos donde se documentan estas situaciones para ponerlo a disposición de los compañeros ya que estas situaciones son muy específicas de esta empresa.
¿Cuál es el modelo de enseñanza que seguirá la universidad?
El Tecnológico de Monterrey nos apoyó en parte del diseño, también el IPADE y otras instituciones de renombre.
Hemos recurrido al Instituto Politécnico y universidades tecnológicas para enriquecer el programa si bien tenemos técnicos, necesitamos expertos en programas.
Si tenemos que mandar a un técnico al extranjero, haremos las gestiones para enviarlo a la mejor institución educativa. Con la reforma energética habrá mucha demanda de especialistas.
El esquema que planteamos está basado en competencias que se adquieren sobre la práctica.
El participante tendrá machar herramientas para capacitarse, desde material en líneas, asesoría presencial, información que podrá bajar en aplicaciones, asistencia en campo, etc. Después será evaluado para la certificación.
¿Cuál es el costo operativo de la universidad?
Poco a poco iremos calculando el costo real, cuánto nos va a costar enviar a los ingenieros al extranjero, el perfeccionamiento del plan de estudios, generar el material de apoyo, etc.
La segunda etapa de la universidad estará enfocada en la especialización para la operación de plantas, el personal ocupado en esta área representa 15 por ciento de la población de Pemex.
Fuente: Milenio| MAYRA MARTÍNEZ MEDINA
