Un nuevo caso de Bullying se presentó ahora en el municipio de Amozoc, en Puebla, donde un niño de 12 años fue golpeado por varios de sus compañeros de tercer grado de secundaria, provocándole graves heridas en la cabeza que lo llevaron al hospital, donde cayó en coma.
Antonio de Jesús López Monje, el menor agredido, sufrió la golpiza por parte de sus compañeros el pasado 28 de octubre en la secundaria técnica número 10 Galileo Galilei, en el municipio de Amozoc, de acuerdo con la prensa local.
La madre de Antonio, María de Jesús Monje Tapia, asegura que la agresión comenzó dentro del plantel, pero cuando su hijo logró echarse a correr fue alcanzado por sus compañeros en un deportivo cercano, donde continuaron golpeándolo.
Cuando llegó a su casa, el niño le confesó que fue golpeado y que tenía un dolor de cabeza. Al día siguiente Antonio se desmayó y su mamá lo llevo inmediatamente a un hospital cercano, pero ahí no pudieron atenderlo y tuvieron que trasladarlo a una clínica de la Ciudad de México.
En el hospital capitalino fue intervenido quirúrgicamente debido a que presentaba traumatismo craneoencefálico severo y un coágulo en el cerebro, provocado por los golpes que recibió. Sin embargo, después de la operación el menor cayó en coma y estuvo en ese estado varios días.
Antonio logró sobreponerse y salió del coma, pero ahora presenta secuelas: tiene parálisis en la mitad de su cuerpo y no reconoce a sus familiares.
Por este hecho, la Secretaría de Educación de Puebla decidió separar de su cargo Margarito Basilio Gómez, director de la secundaria Galileo Galilei, por no informar de esta agresión a las autoridades.
A través de un comunicado, la SEP estatal informó que “existe colaboración con la Secretaría de Salud estatal para que el alumno reciba la atención médica necesaria, ya que según los propios padres de familia, el niño padecía desde hace algún tiempo un tumor, situación que al parecer se agravó debido a los hechos recientes (los golpes)”.
La dependencia también dijo que se brindará asesoría psicológica y jurídica a los padres del niño.
Fuente: Sin Embago| La Redacción