Uno de los políticos más enfadados con la abrupta salida del PRD del Pacto por México fue, sin duda alguna, el dirigente nacional del PAN, Gustavo A. Madero.
Y así lo evidenció este viernes en la entrevista que concedió a Carmen Aristegui en su espacio de noticias de MVS, donde desestimó las razones esgrimidas por los perredistas y los acusó dehy poner “en riesgo” las reformas político-electoral y energética.
“Una reforma no debe ser rehén de un partido”, dijo el líder panista, quien, ya encarrerado, se encargó de darle un raspón al presidente Enrique Peña Nieto y de paso tundió a su correligionario, el senador chihuahuense Javier Corral.
De Peña, dijo que “la regó” al decir que el Pacto por México no busca “unanimidad”.
“No es el espíritu del Pacto, la regla era diferente, construir acuerdos entre tres. Cuando hay diferencias cantadas, como fue en la fiscal, yo quiero que registres cómo se opone el PAN. Y vamos a ver cómo se comporta otra fuerza política.
“Yo digo que la regó porque esa expresión no aplica al Pacto, sino al proceso legislativo. En el pacto era más allá de generar una mayoría simple, buscar consensos entre las tres fuerzas políticas… distingan cómo el PAN, que no estuvo de acuerdo cuando el PRD se va con el PRI para aprobar la reforma hacendaria, cómo nos levantamos de la mesa”, dijo.
Además, negó que el Pacto por México haya sustituido al Congreso, pues “cada vez más los legisladores participan”.
Madero también dijo que la prioridad son las dos reformas constitucionales –política y energética–, y posiblemente el próximo año ya se discutirán las leyes reglamentarias de la reforma en telecomunicaciones.
“Si tienes que escoger, te quedas con las que son constitucionales y las que van a brindar por transitorio las secundarias, a meter una secundaria y poner en riesgo una constitucional”, agregó.
El dirigente nacional panista se fue luego contra Corral, de quien dijo: “Coincide más con la forma de pensar del PRD, Andrés Manuel López Obrador, Encinas, Ebrard y Monreal…”.
Criticado por sus correligionarios por conducirse con una “visión pequeña” desde la oposición y por su abierta cercanía con el presidente Enrique Peña, Madero señaló que los perredistas pueden abortar la aprobación en el Congreso de las reformas político-electoral y energética.
Y no es porque le falten votos al PRI y al PAN para aprobar esas iniciativas, subrayó, sino porque los opositores las pueden impedir “hasta físicamente”.
“Está en riesgo que no haya una reforma política-electoral y energética… pueden hasta físicamente impedirlo”. Eso, apuntó, pueden hacerlo con la fuerza, tomas de tribunas o la toma del Congreso.
De acuerdo con el panista, los perredistas se retiraron del Pacto por México porque “vieron venir” la reforma energética, a la que se oponen, a pesar de que en la reforma político-electoral sí se tomaron en cuenta sus planteamientos para la elaboración de un proyecto de dictamen que, dijo, quedó terminado ayer a las 4 de la mañana.
Madero pidió al PRD que no argumente razones “que no son”, cuando el fondo, insistió, es su negativa a terminar con el “modelo monopólico” de Petróleos Mexicanos.
Advirtió que si el PRD decide no levantar la mano en la votación, no quiere decir que sus exigencias no estuvieran incorporadas en la reforma político-electoral.
El Pacto por México, dijo, es “un compromiso de voluntades”, en el que hay 95 compromisos que había que atender para que “México fuera mejor”. De todos, hay dos pendientes: la reforma energética y la reforma política.
“Pusimos como condición que antes de la energética se aprobara la política… El PRD participó en todas las mesas, hasta ayer a las 4 de la mañana, y cuando vieron que ya iba a ser dictaminada se levanta del Pacto.
“Ellos tienen un interés de que no se apruebe una reforma energética y la manera de hacerlo es descarrilar acuerdos”, subrayó.
Fuente: Proceso| La Redacción| Aristegui Noticias