El estudio realizado por el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública de la Cámara de Diputados precisa que al año se trabajan un promedio de 2 mil 300 horas.
México es el país donde más horas se trabajan por año, en promedio 2 mil 300, sin embargo, es donde menos remuneración económica se obtiene de una jornada laboral.
Así lo reveló el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública de la Cámara de Diputados (CESOP), en su documento de trabajo Política laboral: Algunas notas sobre empleos, salarios y seguro de desempleo, en el primer año de gobierno de Enrique Peña Nieto, en el que se menciona la magra creación de empleos durante este año.
México se sitúa como la nación cuyos trabajadores laboran el mayor tiempo por año (2 mil 357 horas), superando incluso el promedio de países asiáticos (2 mil 154), de África (2 mil 138), del Medio Oriente (2 mil 23), de América del Sur (1 mil 989), de Oceanía (1 mil 849) o de Europa (1 mil 757 horas).
El estudio elaborado por el investigador del CESOP, José de Jesús González, agrega que el pago por hora de un salario profesional en el país es casi 10 veces menor al que se paga en la ciudad de Zurich, Alemania, localidad que ocupa el primer lugar en remuneración del salario.
También, se examinó la propuesta de reforma constitucional, que actualmente se discute en el Senado, sobre seguro de desempleo porque ha generado múltiples opiniones.
Entre ellas, recordó, la del Departamento de Ciencias Sociales de la Universidad Iberoamericana de Puebla, que sostiene que como se encuentra planteado el seguro de desempleo, más que un derecho es un riesgo para los trabajadores, ya que de acuerdo con dicho Centro de estudios, esa modalidad laboral es sólo la ampliación a una prestación que ya existe, para que las personas desempleadas puedan disponer por seis meses de parte de su fondo de retiro por adelantado.
El investigador del CESOP destacó también que el contexto prevaleciente en el país en materia de empleo, presenta las características que reiteradamente se han advertido en México en los últimos años: magro crecimiento salarial, leve incremento en los niveles de creación de nuevas fuentes de empleo, la pérdida constante del poder adquisitivo, afianzamiento del fenómeno de la informalidad laboral y el estado de vulnerabilidad para los sectores asalariados.
El texto de González concluye que en materia de seguro de desempleo, éste ha sido objeto de amplia discusión y polémica entre los analistas y estudiosos del tema, quienes cuestionan su viabilidad financiera y cobertura. Igualmente se debate si dicha propuesta representa una alternativa para afrontar exitosamente el fenómeno del desempleo o que constituye un mero paliativo o un placebo.
Fuente: Milenio| ISRAEL NAVARRO