PUEBLA, Pue.- Representantes del Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel), apoyados por elementos de la Policía Federal vestidos de civil, desmantelaron las radios comunitarias de los pueblos Santa María Zacatepec y San Bernardino Tlaxcalancingo.
En un operativo realizado la noche de ayer y que incluyó el cierre de calles, los policías sustrajeron computadoras, documentos oficiales, micrófonos, consolas y todos los aparatos que usaban las estaciones Axocotzin Radio y La Voz del Pueblo de Zacatepec para transmitir programas con perfil social, cultural y agrario.
Según el representante del Ifetel, Raúl Leonel Mulhia, ambas radiodifusoras fueron cerradas porque violentaban la ley y afectaban la señal de estaciones comerciales e incluso el vuelo de helicópteros y aviones.
En las dos estaciones se abordaron en los últimos días temas “incómodos” para el gobierno estatal, entre ellos el de los presos políticos por el gasoducto y las termoeléctricas, y las asambleas ciudadanas que se organizaron por la desaparición de los registros civiles en las juntas auxiliares, relacionadas con la represión de los habitantes de Chalchihuapan.
De hecho, en el noticiero “Las Espinas del Nopal” fue entrevistada la diputada local Roxana Luna Porquillo para que hablara sobre la muerte del niño José Luis Tehuatli, considerado víctima mortal de la llamada “Ley Bala”.
De acuerdo con el gobierno de Rafael Moreno Valle, Luna instigó a los pobladores de Chalchihuapan para que realizaran la manifestación del pasado 9 de julio, que derivó en un violento desalojo por parte de la policía.
Además, en la fundación de las dos estaciones que fueron desmanteladas participó el activista Juan Carlos Flores Solís, preso desde abril por formar parte del movimiento opositor al gasoducto Morelos.
La radiodifusora de Tlaxcalancingo transmitía por el 104.5 de Frecuencia Modulada (FM) y por internet, y la de Santa María Zacatepec lo hacía a través de la frecuencia 100.7 de FM.
Uno de los programas que se trasmitían en la estación de Tlaxcalancingo era conducido por el profesor-investigador de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP) Ricardo Pérez Avilés, quien fue hostigado e intimidado por apoyar la oposición de campesinos al Gasoducto Morelos.
Fuente: Proceso| GABRIELA HERNÁNDEZ