Empresas estadounidenses como Rexnord, Caterpillar Nucor o CTS no han cancelado intenciones de trasladar ciertas operaciones a nuestro país.
Empresas estadounidenses del sector manufacturero mantienen sus planes de trasladar líneas de producción hacia México, a pesar de las amenazas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de imponer un impuesto fronterizo a las importaciones de su vecino del sur, reportó el rotativo The Wall Street Journal (WSJ).
Firmas como Rexnord, dedicada a la producción de rodamientos y válvulas, Caterpillar, fabricante de maquinaria pesada; Nucor, que manufactura productos de acero para la construcción o la firma de componentes electrónicos CTS, no han renunciado a sus planes de mudar a México ciertos procesos productivos.
La semana pasada, Todd Adams, director general de Rexnord (con sede en Milwaukee) dijo a analistas que trasladar parte de su operación de manufactura hacia México “no es algo de lo que se pudieran arrepentir”, reseñó el WSJ.
Detalló que su plan de mover una planta que actualmente emplea a 350 trabajadores estadounidenses es parte de un plan para ahorrar 30 millones de dólares anuales, aunque admitió que la compañía estará atenta a “lo que suceda”, dejando entrever un posible ajuste sujeto a las políticas concretas de Trump.
Caterpillar, por su parte, afirmó que continúa con un proceso de reestructuración que incluye el traslado de puestos de trabajo de su planta en Illinois a una nueva en Monterrey; sin embargo, también procederá con cautela. “Simplemente vamos a tener que esperar y ver cómo se desenvuelven las cosas”, comentó al WSJ Brad Halverson, director financiero de la empresa basada en Peoria, Illinois.
Durante su campaña presidencial y ya como presidente, Donald Trump ha lanzado amenazas a las empresas que trasladen a otros lugares operaciones y puestos de trabajo desde los Estados Unidos y pretendan exportar de vuelta a este país desde otras latitudes.
Con el apoyo de miembros del partido Republicano, ha amagado con imponer aranceles de 35% a las exportaciones a Estados Unidos de estas empresas y también con aplicar una tasa de ajuste fronterizo de 20% que impediría a las empresas matrices establecidas en ese país deducir el costo de sus importaciones, a efecto de desincentivarlas.
A pesar de ello, la estadounidense Nucor, en sociedad con la japonesa JFE Holding, manifestó en su oportunidad que su proyecto de abrir una factoría de 270 millones de dólares este verano en México se sostiene hasta que no haya una señal clara de que Trump cumplirá sus amenazas. “Todavía esperamos estar en México, pero lo veremos”, aseguró John Ferriola, CEO de Nucor, según lo reportado por Investors Bussines Daily.
CTS Corp, fabricante de componentes electrónicos, refirió también a analistas este martes que está en camino de mudar la producción de Elkhart, Indiana, donde se emplea a unos 230 trabajadores, a otros lugares de “mejores costos” fuera de los Estados Unidos para el 2018, en los que figura México, China y Taiwán. (Con información de Guillermo Castañares)
Inyectará 7,000 mdd en Arizona
Intel se suma a ola de inversiones en Estados Unidos
El gigante estadounidense de microprocesadores Intel anunció este miércoles en la Casa Blanca, junto al defensor del “Made in America”, Donald Trump, una inversión de 7,000 millones de dólares en su fábrica de Arizona, para que ésta sea capaz de producir chips de 7 nanómetros.
El presidente estadounidense, quien hizo del regreso de la producción industrial a Estados Unidos una prioridad de su mandato, vinculó enseguida su llegada al poder con esta inversión.
Los 7,000 millones de dólares permitirán la creación de 3,000 empleos de fuerte valor añadido y “de altos ingresos”, e indirectamente 10,000 nuevos puestos de trabajo, explicó la compañía.
“Intel está muy orgullosa de que la mayoría de nuestra fabricación se haga aquí, en Estados Unidos, y que la mayoría de nuestra investigación y desarrollo esté en Estados Unidos”, proclamó su director ejecutivo, Brian Krzanich, en la Casa Blanca.
Se trata del último anuncio de una importante empresa sobre una gran inversión en suelo estadounidense desde que Donald Trump les instó a crear puestos de trabajo y a fabricar en Estados Unidos.
La decisión, reconoció el director general de Intel, fue adoptada en apoyo de la política de desregulación y de rebaja impositiva lanzada por la administración Trump, que “hace verdaderamente ventajoso producir en Estados Unidos”.
Dicha decisión fue tomada a pesar de la rebelión del sector tecnológico que se opone al decreto migratorio del presidente, en la que Intel tomó parte.
Japón se hace presente
La principal firma japonesa de electrónicos, Sharp Corp., anunció sus planes para la construcción de una planta de paneles de cristal líquido. Aunque las cifras de inversión se omitieron, se indicó que serían cientos de miles de millones de yenes, y tampoco se indicó la ubicación.
El anuncio de esta planta sería una muestra de que Sharp contribuye con la economía estadounidense y los planes del presidente Trump, refirió la agencia japonesa Kyodo. (AFP)
Fuente: El Economista