La producción de Pemex sigue bajando

La producción de hidrocarburos de Pemex bajó en este primer semestre de 2016 en relación con el mismo semestre del año pasado, en 3.8 por ciento. La del petróleo crudo bajó 2.6 por ciento. Esto último equivale a 5.2 por ciento anual.

Pero su producción de gas natural, en las mismas condiciones, bajó 7 por ciento. Equivale a 14 por ciento anual.

Algunos que recibieron esa información previamente dijeron que esas y las otras bajas de producción, en el segundo semestre y en el año próximo, iban a aumentar en mayor proporción que los reconocimientos de presupuesto a Pemex. Que si la producción de crudo había bajado a 2 mil 176 miles de barriles diarios, después la rebaja sería mayor.

Burgos, productora de gas natural entregada desde los gobiernos panistas a empresas extranjeras, tuvo una nueva caída en su producción de gas, de mil 174 millones de pies cúbicos diarios (mmpcd) al principio del semestre, a 960 mmpcd al final. La caída del mismo, a 18 por ciento, fue en estos seis meses.

Hubo un incremento modesto de petróleo crudo ligero con la incorporación del campo Xanab en el activo Litoral de Tabasco, en la región marina suroeste, que ha tenido un aumento constante. A finales del año pasado entró el pozo Tsimin-3DL, con una producción inicial de 3 mil 636 barriles diarios de crudo ligero. También hubo un aumento marginal de 5.2 por ciento de crudo superligero con el pozo Xux en la misma región. Está cerca de otro superligero, Xikin-1, descubierto meses antes. Y eso que el fuerte del litoral de Tabasco es el gas, del que ya genera 20 por ciento de la producción nacional.

El número de pozos de desarrollo terminados por Pemex disminuyó de 167 en 2015 a 91 en 2016, una reducción de 45.5 por ciento.

El número promedio de equipos de operación en 2015 fue de 82 y el de 2016, de 32, una reducción de 61.1 por ciento. De éstos, los equipos de operación de desarrollo bajó de 68 a 24, un 65 por ciento de rebaja.

El volumen de importación de gas seco, con la baja de producción de gas y el aumento de su demanda, subió 40.9 por ciento, y el aumento en la importación de productos de la petroquímica fue de 65.7 por ciento.

Además, se abre el mercado de gas natural, y Pemex anuncia que cede 70 por ciento de sus contratos. Sigue el suicidio lento.

Industriales anuncian que habrá más accidentes. Ya hubo 15 accidentes en Tula, 12 en Madero y 10 en Minatitlán.

El valor de las exportaciones petroleras cayó por la rebaja de producción, a lo largo del semestre, por la reducción de producción y del precio, en 37.3 por ciento de su valor.

Pemex tuvo pérdidas por 7 mil 700 millones de dólares en el primer semestre.

Así como señalamos la zona excepcionalmente positiva como Litoral de Tabasco, ponemos atención con la altamente negativa, Chicontepec, llamada oficialmente Aceite Terciario del Golfo. Abundó propaganda oficial a eso y sobre las trasnacionales beneficiadas. Gastó 32 mil millones de pesos en 2010, luego fluctuaciones hasta volver a subir a 27 mil millones en 2013, y su presupuesto para 7.6 miles de millones para 2015. Un dineral. Su producción, después de gastos en investigaciones para aumentarla, llegó a un máximo de 69 miles de barriles diarios (mbd), menos de 3 por ciento de la producción nacional. Su producción en 2016 es de 41 mbd. La producción promedio por pozo fue bajando de 40 barriles diarios en 2008 a 17 barriles en 2016. Los mejores pozos marinos del suroeste llegan a miles de barriles diarios inicialmente, y son muchísimo más baratos. Una ratería gigantesca en perjuicio de Pemex y del país.

Vemos varias tendencias claras en la política oficial de los hidrocarburos en este periodo.

Sigue la caída permanente en la producción, principalmente crudo y gas natural, en este caso hasta de 7 por ciento en el semestre. Pero las caídas de productos ya refinados o, en general, transformados, han sido mucho mayores. La tendencia es entregar cada vez más industrias de transformación más rápidamente a trasnacionales. La petroquímica, tal vez la que mayormente transforma, es la que más recibe y entrega divisas, por no decir mordidas.

Así como Chicontepec, al que se hizo mucha propaganda, va hacia su tumba, mientras que Litoral de Tabasco va hacia arriba. Esto quiere decir que el entreguismo, pese a toda la mentira, el saqueo por parte de los funcionarios, no puede ser eterno y Pemex tiene semillas para un mejor futuro.

Fuente:La Jornada, Antonio Gershenson.