La mayoría de archivos en México, en situación precaria y sin orden: académicas de la UNAM
Asegura la dependencia que su destino final será el Archivo General de la Nación
La Secretaría de Educación Pública (SEP) negó que su acervo histórico, compuesto por más de 92 millones de folios, esté en peligro de ser dañado o destruido debido al próximo traslado a una bodega.
En respuesta a la información publicada ayer por La Jornada sobre las consecuencias que podría tener esta sexta mudanza de documentos, que se prevé que comenzará en septiembre, la SEP indicó que el cambio de lugar se realizará con el cuidado que requieren los materiales y precisó que dicha bodega, ubicada en Tlalnepantla, no será el destino final de los documentos, sino el Archivo General de la Nación (AGN).
Esto es todo un protocolo de conservación y/o mantenimiento de materiales y todo será tratado cuidadosamente para que esté en óptimas condiciones, no se trata de pasarlo de una bodega a otra. Su destino final será el AGN, ni se maltrata, y menos aún se pierde, por el contrario, especialistas operan con los cuidados necesarios, con una bitácora puntual y reportando el estado que guarda ese tipo de material.
Detalló que los expertos que efectúen el traslado utilizarán todos los aditamentos necesarios para manejar los documentos, como guantes y tapabocas, y añadió que primero se llevan a dicha bodega para clasificarlos, y luego se trasladarán al AGN.
La SEP señaló de forma oficial que el traslado responde a un proceso de optimización de espacios y recursos. Por ello, su “oficialía mayor optó por la concentración de varios archivos en una sola área. Ello en pleno apego a los criterios de operación para la permanencia de los archivos históricos de las dependencias y entidades de la administración pública federal.
Subrayó que el archivo histórico de la secretaria ha formado administrativamente parte del archivo de concentración, pero su acervo se ha manejado de manera independiente al general.
Tras indicar que su archivo histórico contiene documentos de 1865 a 1988, que su dimensión es de mil 200 metros cuadrados y que también cuenta con un archivo fotografiado de aproximadamente 2 mil 400 imágenes, precisó que el traslado final al AGN se da “en cumplimiento de la nueva Ley de Archivos, publicada en el Diario Oficial de la Federación el 23 de enero del presente año, la cual otorga atribuciones al AGN para concentrar los documentos de valor histórico generados por las dependencias y entidades del Ejecutivo federal”.
Añadió que el artículo 5 de la Ley Federal de Archivos establece que quienes realicen estos traslados de documentos han de regirse por los principios de conservación, procedencia, integridad y disponibilidad. Por lo que en este tipo de mudanzas se debe contar con al menos un profesional (titulado) en conservación y restauración que deberá estabilizar los documentos que conforman el patrimonio documental de la institución.
Deberá “expedir diagnósticos sobre el estado de conservación de los archivos bajo su resguardo, aplicar y supervisar programas de conservación preventiva, y verificar las condiciones ambientales de las áreas de resguardo de documentos para proponer, en su caso, medidas correctivas necesarias y elaborar reportes periódicos sobre las mismas.
La SEP aseguró que se coordina con el AGN en la operación, transferencia y estrategias a seguir para que su archivo cuente con la adecuada conservación, organización y difusión de la documentación.
Sus condiciones son absolutamente desfavorables para la investigación, consideran
Fernando Camacho Servín
La mayor parte de los archivos históricos de México se encuentran en un estado de conservación muy precario, guardados en bodegas sin ningún orden, y en condiciones absolutamente desfavorables para la investigación, lo cual pone en riesgo la memoria del país.
Así lo indicaron académicas universitarias especialistas en el tema, a propósito del próximo traslado de un acervo perteneciente a la Secretaría de Educación Pública (SEP), integrado por más de 92 millones de folios, en donde se incluyen datos sobre algunos de los personajes más importantes de la cultura nacional, entre ellos José Vasconcelos, Frida Kahlo y David Alfaro Siqueiros.
Como se informó ayer en estas páginas, a pesar de que 60 por ciento del mencionado archivo presenta alto grado de deterioro, y no existen las condiciones adecuadas para manejarlo y conservarlo, será trasladado por sexta ocasión, esta vez a una bodega de la zona industrial de Tlalnepantla.
Al respecto, Gloria Villegas, directora de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), lamentó que la mayor parte de los archivos no tienen las condiciones necesarias para preservar la memoria histórica de nuestro país.
A pesar de que gran parte de los acervos nacionales son extraordinarios, añadió la historiadora, sabemos que muchos de los documentos han sido embodegados, en condiciones absolutamente desfavorables para la investigación.
Por ello, la obligación de las autoridades que tienen bajo su responsabilidad estos tesoros es encontrar las mejores condiciones para que se preserven. Quienes nos movemos en el campo de las artes, las ciencias y las humanidades tendríamos que hacer una petición enérgica para que no sólo se piense en mover los documentos para ganar más espacio, sino para realmente hacer una revisión a fondo de ellos.
Además del archivo de la SEP, Villegas lamentó que en términos generales hay un gran déficit en el manejo de acervos documentales, aunque instituciones como el Archivo General de la Nación y la propia UNAM están tratando de hacer una labor diferente en este terreno.
Sin duda hay funcionarios e instituciones que se preocupan por que haya lugares idóneos, con las condiciones necesarias de temperatura y fumigación, pero todavía estamos en un rango muy deficiente, por lo que los esfuerzos en este ámbito deben encaminarse pronto hacia la digitalización.
No es un problema exclusivo de México
Por su parte, María Teresa Uriarte Castañeda, coordinadora de difusión cultural de la UNAM, coincidió en que la condición de los archivos históricos en México en general es deplorable, en primer lugar porque no se tiene conciencia del valor mismo del archivo.
Sin embargo, la académica subrayó que éste no es un problema único de México, sino un fenómeno presente incluso en países con más recursos económicos, como Estados Unidos, donde tampoco se le ha dado la importancia debida al tema de la digitalización, y por ende al presupuesto para realizar esa tarea.
Lo que está consagrado en los papeles y en los archivos de cualquier tipo es parte de nuestro pasado, y por lo tanto debe ser conservado adecuadamente. Ojalá que la mejor forma de hacerlo sea la digitalización, para que cualquier persona, en cualquier parte del mundo y en cualquier época lo pueda consultar, aseveró.
Fuente: La Jornada