Gerardo Ruíz Esparza, titular de la SCT. Foto: Benjamin Flores
El proyecto de telecomunicaciones más ambicioso de este sexenio, la Red Compartida, terminó en un litigio mediático y en tribunales después de que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) confirmara este jueves 17 que el consorcio Altán, conformado por una docena de empresas y fondos de inversión, será el ganador de este proyecto que implicará una inversión de siete mil millones de dólares.
Consorcio Altán fue el único finalista en este proyecto que planea desplegar una infraestructura mayorista de servicios de telecomunicaciones en banda ancha con 10 mil radio bases en todo el territorio nacional, a partir de la concesión de 90 Mhz en la banda 700 Mhz, liberada tras el “apagón analógico”.
Según el fallo de esta mañana de la SCT, Consorcio Altán cumplió con los parámetros técnicos de cobertura y económicos necesarios para desplegar esta red que incluirá también el par de hilos de fibra óptica de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Originalmente, Consorcio Altán se denominó Consorcio Veta Grande. Está formado por operadores como Axtel y Megacable, más fondos de inversión como Morgan Stanley, que poseen el 33.38 % de la participación accionaria.
También participan fideicomisos y sociedades como Isla Guadalupe Investments, North Haven Infraestructure Partners LP, North Haven Infraestructure Partners II, y podría tener de clientes potenciales a Hansam SA de CV, a International Finance Corporation, China-México Fund LP y la canadiense Caisse de Depot et Placement Du Quebec.
Desde el 4 de noviembre pasado, el otro consorcio denominado Rivada Networks se inconformó con el procedimiento, ya que fue descalificada al no cubrir en tiempo y forma la garantía de seriedad de mil millones de pesos. En un comunicado de prensa, Rivada afirmó que la licitación se trataba de una “coronación” a favor de Consorcio Altán.
Rivada Networks interpuso un juicio de amparo en contra de la descalificación de la SCT que fue desechado el 14 de noviembre por el segundo juzgado de distrito en materia administrativa especializado en competencia económica, radiodifusión y telecomunicaciones.
La jueza Silvia Cerón afirmó que la solicitud de Rivada no cuenta con las atribuciones para ser dirimido por un tribunal especial en telecomunicaciones y lo regresó al juzgado décimo quinto de distrito en materia administrativa en la Ciudad de México.
De acuerdo con distintos especialistas en la materia, es posible que el litigio de Rivada derive en un conflicto entre juzgados hasta definir a quién le compete este tema.
Esta mañana, la SCT impidió el acceso a la ceremonia del fallo al apoderado legal de Rivada, Julián Domínguez, quien acusó a la dependencia de tener una “actitud errática y parcial” y anunció que pedirá la suspensión del fallo que le otorga a Altán la licitación de la Red Compartida.
Consorcio Altán tiene como plazo hasta el 31 de marzo de 2018 para iniciar operaciones comerciales con una cobertura no menor al 30% de la población, a través de una Asociación Público Privada (APP), la primera red de telecomunicaciones de su tipo construida con una APP.
El Organismo Promotor de Inversiones de Telecomunicaciones (PROMTEL), descentralizado de la SCT, será el responsable de vigilar el cabal cumplimiento de todas y cada una de las obligaciones previstas por el consorcio ganador.
Originalmente, Consorcio Altán se denominó Consorcio Veta Grande. Está formado por operadores como Axtel y Megacable, más fondos de inversión como Morgan Stanley, que poseen el 33.38 % de la participación accionaria.
También participan fideicomisos y sociedades como Isla Guadalupe Investments, North Haven Infraestructure Partners LP, North Haven Infraestructure Partners II, y podría tener de clientes potenciales a Hansam SA de CV, a International Finance Corporation, China-México Fund LP y la canadiense Caisse de Depot et Placement Du Quebec.
Desde el 4 de noviembre pasado, el otro consorcio denominado Rivada Networks se inconformó con el procedimiento, ya que fue descalificada al no cubrir en tiempo y forma la garantía de seriedad de mil millones de pesos. En un comunicado de prensa, Rivada afirmó que la licitación se trataba de una “coronación” a favor de Consorcio Altán.
Rivada Networks interpuso un juicio de amparo en contra de la descalificación de la SCT que fue desechado el 14 de noviembre por el segundo juzgado de distrito en materia administrativa especializado en competencia económica, radiodifusión y telecomunicaciones.
La jueza Silvia Cerón afirmó que la solicitud de Rivada no cuenta con las atribuciones para ser dirimido por un tribunal especial en telecomunicaciones y lo regresó al juzgado décimo quinto de distrito en materia administrativa en la Ciudad de México.
De acuerdo con distintos especialistas en la materia, es posible que el litigio de Rivada derive en un conflicto entre juzgados hasta definir a quién le compete este tema.
Esta mañana, la SCT impidió el acceso a la ceremonia del fallo al apoderado legal de Rivada, Julián Domínguez, quien acusó a la dependencia de tener una “actitud errática y parcial” y anunció que pedirá la suspensión del fallo que le otorga a Altán la licitación de la Red Compartida.
Consorcio Altán tiene como plazo hasta el 31 de marzo de 2018 para iniciar operaciones comerciales con una cobertura no menor al 30% de la población, a través de una Asociación Público Privada (APP), la primera red de telecomunicaciones de su tipo construida con una APP.
El Organismo Promotor de Inversiones de Telecomunicaciones (PROMTEL), descentralizado de la SCT, será el responsable de vigilar el cabal cumplimiento de todas y cada una de las obligaciones previstas por el consorcio ganador.
México y la UE lanzan proyecto sobre energía geotérmica
México aprovecha “menos del 10 por ciento” de su potencial en energía geotérmica, pese a ocupar el cuarto lugar a nivel mundial en capacidad instalada con 926 megawatts, dijo el secretario de Energía (Sener), Pedro Joaquín Coldwell.
Durante el lanzamiento de un proyecto de cooperación entre México y la Unión Europea para la investigación de sistemas geotérmicos, el funcionario dijo que dicha fuente de energía (aquella que utiliza el calor de la tierra para generar calor y electricidad) además de representar un fluido constante es una de las fuentes renovables más económicas ya que puede llegar a constar hasta 20 por ciento menos que la generación convencional utilizando diésel o combustóleo.
Acompañado por el jefe de la delegación de la Unión Europea en México, Andrew Standley, el secretario dijo que el proyecto es dirigido al desarrollo y aplicación de nuevas metodologías y tecnologías en ese campo.
Recordó que México incursionó por primera vez en la generación de energía geotérmica en 1973 con la construcción de la terminal de Cerro Prieto, en Mexicali, Baja California, la segunda planta más grande del mundo con una capacidad instalada de 570 megawatts y que produce energía suficiente para abastecer el 40 por ciento de la energía que demanda el estado de Baja California.
El acuerdo anunciado por la Secretaría de Energía tendrá una inversión total de 20 millones de euros que serán aportados por el Fondo de Sustentabilidad Energética y la Comisión Europea (10 millones de euros cada uno) y con él se buscará sentar las bases para desarrollar el aprovechamiento de los sistemas geotérmicos, que por su complejidad, dijo Coldwell, requieren de un esfuerzo conjunto para incrementar la generación eléctrica a través de este recurso.
Por parte de México, el consorcio que desarrollará dichas tecnologías estará encabezado por la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, con la participación de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Instituto Nacional de Electricidad y Energías Limpias (Ineel), el Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada (Cicese) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
La contraparte europea estará liderada por el Helmholtz-Zentrum Potsdam Deutsches GeoForschungsZentrum (GFZ) de Alemania, con la colaboración de más de 20 instituciones de Alemania, Bélgica, Francia, Grecia, Islandia, Italia, Países Bajos, Polonia Noruega y el Reino Unido.
“Esto nos pone en la frontera de los esfuerzos del conocimiento, a través de la colaboración podemos llegar muy lejos, este es un proyecto que ejemplifica esta cooperación, el mundo del conocimiento es de puentes, de interacción y no de murallas, felicidades a todos los países participantes”, dijo el director general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), Enrique Cabrero Mendoza.
Fuente: Proceso| Jenaro Villamil