El grupo de delincuentes arremetieron directamente contra Francisco Sánchez, quien perdió la vida y era empleado del Ayuntamiento de Juchitán del Departamento de Limpia y chofer de un médico particular.
El encargado de la Subprocuraduría de Justicia de la región del Istmo, José Mathus, reportó que el ataque se perpetro en las Calles de Allende, esquina Callejón del Encanto, a las puertas de las oficinas del instituto político, donde se desarrollaba una reunión de trabajo que fue irrumpida de forma violenta por los agresores.
Indicó que los pistoleros arremetieron directamente contra Francisco Sánchez quien se encontraba parado en una de las puertas del inmueble mismo que perdió la vida en lugar, también resultó herido gravemente Ángel López Manuel, cerca de ellos se encontraba el líder estatal del PT Mariano Santana López, quien resultó ileso.
El fiscal afirmó que en el lugar se recogieron 15 cascajos de calibre 9 milímetros, dos ojivas y dos fragmentos del mismo calibre, datos que fueron canalizados al legajo de investigación abierto, y se iniciaron el resto de diligencias procedentes.
Mathus no descartó que el atentado esté relacionado con un tipo de venganza, aunque hay otras líneas de investigación a seguir.
Testigos presenciales de los hechos relataron que los implicados viajaban en un vehículo compacto sin placas, pero del que ya se tienen características específicas, datos que tomaron los elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) en coordinación con la Policía Estatal para iniciar la búsqueda inmediata.
La única víctima del atentado se desempeñaba como empleado del Ayuntamiento de Juchitán del Departamento de Limpia y también como chofer de un médico particular.
Ángel López Manuel, fue canalizado a una clínica particular de la localidad, donde su estado de salud fue reportado como fuera de peligro.
El diputado local del PT, Pavel López denunció que el blanco de la agresión era el líder estatal de su instituto político, exigiendo a las autoridades judiciales avanzar en el esclarecimiento puntual del hecho.
Fuente: Milenio
