Reciben dos dólares diarios.Han muerto de hambre 1.2 millones de menores en los pasados 12 años.
En México más de 3.5 millones de infantes son explotados en el campo, trabajan como jornaleros, principalmente en las zonas agrícolas del país, a cambio de dos dólares diarios, y 1.2 millones de niños han muerto por hambre en los pasados 12 años.
Gerardo Sánchez, presidente de la Confederación Nacional Campesina, denunció que la situación de estos “niños del futuro” se ve agravada por los efectos de la intensa sequía que afecta a 23 estados de la República, lo cual se refleja en una deficiente alimentación y disponibilidad de agua para beber.
En el contexto de la conmemoración del Día del Niño en México, el dirigente cenecista lamentó que, de acuerdo con estadísticas oficiales y de instituciones educativas, más de 100 mil niños mueren cada año en el país a por la desnutrición que deriva en anemia.
“El mejor homenaje para las nuevas generaciones, aseguró, radica en garantizar el derecho a la alimentación de todos los mexicanos, principalmente los niños del sector rural que ante las embestidas de trasnacionales han substituido su alimentación, tradicionalmente basada en productos básicos como el maíz y la leche, por productos chatarra como los refrescos, pastelillos y botanas.
El diputado federal acusó que hasta el momento no se ha considerado ningún programa especial para los jornaleros y menos hacia los niños que laboran en actividades agrícolas de los estados de Sinaloa, Sonora, Baja California, Nayarit, Baja California Sur y Guanajuato, entidades representativas del empleo infantil.
Sánchez manifestó en reunión de trabajo efectuada en el nuevo centro de actos Emiliano Zapata, recién inaugurado por el senador Pedro Joaquín Coldwell, presidente del Partido Revolucionario Institucional, que para contrarrestar esta realidad negativa a los niños de México, sobre todo los que viven del agro, se lucha por una reforma profunda al campo.
“El INEGI reporta que en México trabajan más de 3.5 millones de niños, catalogados en rangos de 5 a 13 años, como los más afectados por una explotación laboral impune, con deficiente alimentación, escolaridad irregular y ausencia de acciones gubernamentales en su apoyo” y por ello “cientos de niños en pobreza hayan optado por sumarse a las filas de la delincuencia organizada como jornaleros del narco”.
Si bien la legislación mexicana no permite el trabajo de menores de 14 años, los empresarios violan principios constitucionales explotando a niños y niñas, por encima de sus derechos a la alimentación, educación y salud.
De acuerdo a informes de Unicef, los niños en México también son explotados laboralmente como cerillos, vendedores ambulantes, cargadores, franeleros, limpiaparabrisas, lavacoches, entre otras actividades por las cuales perciben menos de dos salarios mínimos.
“El 48% de niños y adolescentes que trabajan en México lo hacen en el campo, 14% en el comercio informal, 4% en labores domésticas y 20% en el ramo artesanal. En 64% de todos los casos no recibe salario y su situación es de servidumbre”.
Las entidades federativas donde se ubica la explotación laboral infantil en condiciones de servidumbre son Chiapas, Guerrero, Puebla y Veracruz.
Fuente: Milenio