Pagan a sus accionistas tres veces más que firmas nacionales
Prematuro saber si filiales europeas resentirán la recesión: Valenzuela
Los bancos extranjeros con actividades en México están ordeñando al país, aseguró este jueves Alejandro Valenzuela del Río, director general del Grupo Financiero Banorte (GFNorte). El hecho de que esas firmas foráneas pagan a sus accionistas dividendos en proporción tres veces mayor que los bancos de capital nacional, sostuvo, ha significado una reducción en la oferta de financiamiento a la economía mexicana.
Las filiales de bancos extranjeros en México, afirmó, pagan a sus accionistas un dividendo por el equivalente, en promedio, a 70 por ciento de las ganancias que obtienen aquí, aunque en algún caso el dividendo equivale a 130 por ciento de las ganancias.
La proporción contrasta con la de los bancos de capital nacional, los cuales pagan a sus accionistas un dividendo de 20 por ciento, en promedio, de las ganancias que generan. En el caso de Banorte esa proporción es de 18 por ciento, apuntó.
Entre 2003 y 2011, los dividendos pagados a sus accionistas por las filiales de bancos extranjeros que operan en México suman 20 mil millones de dólares, una cantidad que, si se hubiera quedado en el país como capital de las instituciones para otorgar créditos ahora la penetración financiera en el país –medida como la relación entre el financiamiento y el producto interno bruto– sería superior a lo que se registra actualmente.
El crédito bancario al sector privado equivale a 30 por ciento del producto interno bruto.
La proporción de dividendos respecto de las ganancias que han pagado los bancos extranjeros a sus accionistas es dinero que no se ha invertido en México, dijo Valenzuela en una conferencia de prensa en la que presentó los resultados de la operación del GFNorte en el primer trimestre del año.
Si los bancos mexicanos pagan dividendos de 20 por ciento de sus ganancias y los extranjeros lo hacen en proporción de 70 por ciento, esa diferencia de 50 por ciento son recursos que no se han invertido en México, que si se hubieran canalizado en forma de financiamiento hubieran elevado la penetración del crédito respecto de la economía, dijo.
Una cosa es pagar dividendos y otra ordeñar al país, sostuvo.
Valenzuela destacó la fortaleza del sistema financiero en México en su conjunto y consideró que es prematuro saber si las filiales de firmas de origen europeo que operan en el país resentirán la situación por la que atraviesa la economía de aquel continente, en particular la de España, país que entró en recesión.
La banca europea va a necesitar más capital y el crédito no va a fluir como en el pasado, consideró. Sin embargo, dijo, es prematuro saber si la situación financiera de Europa va a traducirse en una reducción en la oferta del crédito de las filiales bancarias de aquella región en el país. Lo que es un hecho, añadió, es que el nivel de competencia en México se ha acentuado porque los bancos que tienen matrices en Europa se han dado cuenta que el país es de los pocos lugares del mundo donde pueden generar utilidades importantes en la actualidad.
Anticiparse a lo que puede ocurrir a mediano plazo a los bancos europeos parece irresponsable, comentó. Ciertamente tendrán que ocuparse de sus temas en sus matrices ante todo; si eso implica que tengan que salir a vender activos, tendrán que salir a vender activos donde sea. No es todavía totalmente palpable en qué proporciones y en qué peso tenga cada una de las instituciones problemas, pero al final de cuentas están en momentos complejos, no se los deseo a nadie. Banorte, añadió, de entrada analiza si esos bancos se deshacen de algunos de sus activos en México y si podemos comprar, ¿por qué no?
Los resultados
En el primer trimestre del año, el GFNorte generó una utilidad neta por 2 mil 463 millones de pesos, 36 por ciento más respecto del mismo periodo de 2011. Valenzuela destacó que el aumento de la utilidad se dio en medio del proceso de fusión de Banorte e Ixe, iniciado el año pasado, que ha continuado sin que se afecte la eficiencia y la rentabilidad de la institución. A pesar de los costos de la integración, el grupo se ha vuelto más eficiente.
La cartera de crédito del banco creció a una tasa anual de 33 por ciento, mientras la cartera vencida disminuyó de representar 2.3 por ciento de los préstamos totales en marzo de 2011 a 1.8 por ciento del total en el mismo mes de este año. La captación de recursos del público llegó al cierre del primer trimestre de este año a 304 mil 88 millones de pesos, 30 por ciento de crecimiento anual.
Fuente: La Jornada