Para evitar que la falta de solidaridad del Gobierno federal y de organismos públicos lleve a cobros elevados por el suministro eléctrico a los municipios, “que terminan por estrangular sus finanzas”, el senador perredista Tomás Torres propuso que el costo aplicado a municipios por el suministro de energía para semáforos, alumbrado público y bombeo de agua, no exceda la cantidad que se cobra por el servicio doméstico para cargas de bajo consumo, que es de hasta 400 kilowatts hora.
Blanca Estela Botello
La Crónica
Refirió que este año ayuntamientos de por lo menos 20 entidades adeudaban a la Comisión Federal de Electricidad casi 600 millones de pesos por los servicios eléctricos, de ahí la necesidad de reducir las tarifas que cobra la CFE.
Esto, dijo, se puede establecer mediante una reforma al artículo 31 de la Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica.
A manera de ejemplo, refirió que “en entidades como Tabasco, donde desde hace quince años se inició un movimiento de resistencia civil por las altas tarifas eléctricas, sus municipios adeudaban en febrero casi 120 millones de pesos, y en el Estado de México, un sólo municipio, Nezahualcóyotl, tenía un saldo pendiente con CFE de más de 90 millones de pesos.
“Muchos de estos municipios sufren la suspensión constante del suministro eléctrico por falta de pago, lo que limita aún más sus capacidades y contribuye a profundizar la lacerante pobreza que padecen muchas de sus comunidades”.
En contraste, añadió, la CFE no entrega a los municipios un sólo peso de los recursos que se obtienen por los derechos que se cobran a compañías privadas de telecomunicaciones por el uso o goce de postes, torres o registros ubicados en el territorio de los mismos.
Torres expresó que un municipio no puede impulsar el desarrollo de sus habitantes, combatir la pobreza y garantizar el suministro de servicios básicos, cuando las tarifas eléctricas son tan elevada, ni puede fortalecer su capacidad de respuesta frente a la espiral de violencia que afecta al país cuando cerca del 80 por ciento de sus recursos están comprometidos al pago de energía.
Fuente: La Crónica
