El periódico The Washington Post destacó en su edición en Internet que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama pasó poco más de ocho horas en México, mucho menos que el tiempo que transcurrió la semana pasada jugando tres rondas de golf en California.
El rotativo destacó que en el vuelo hacia México, el presidente Obama se pasó todo el viaje ausente de los temas trilaterales, ocupado con Siria, Ucrania, Venezuela y con varios asuntos estadunidenses.
La cumbre se inició en 2005 por el presidente George W. Bush para promover una mayor colaboración económica y las iniciativas transfronterizas.
En una hoja informativa que promocionan "productos clave", la Casa Blanca destacó un "programa de viajeros de confianza" para permitir que la gente se mueva entre los tres países con mayor facilidad, y reuniones de los ministros de energía de América del Norte para promover una mejor cooperación en materia de reformas energéticas.
Los líderes parecían ansiosos de conversar sobre las agudas diferencias, como el tema del oleoducto Keystone XL. Pero Obama pareció estar menos concentrado en los temas de la reunión.
Fuente: La Jornada en Línea
