miércoles, 7 de diciembre de 2011

Se suman a las filas del hambre 4 mil 452 al día

No tienen dinero ni para comer; el 41.8% vive en ciudades, el resto en el campo

El número de pobres subió 43% en cuatro años, según datos del Coneval

Cada día cuatro mil 452 mexicanos se suman a la población en pobreza extrema, es decir, que ni siquiera tienen para comer.

Datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) indican que en los primeros cuatro años de este sexenio (de 2007 a 2010), el número de personas que no tenían el ingreso suficiente para cubrir el costo de la canasta mínima alimentaria se incrementó de 14.7 millones a 21.2 millones.

De acuerdo con la Metodología para la Medición de la Pobreza elaborada por el Comité Técnico para la Medición de la Pobreza, el ingreso empleado para esta medición es el Ingreso Neto Corriente Total Per Cápita (INTPC) obtenido a partir de los resultados de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, y el umbral de pobreza extrema se define a partir del costo de una canasta básica alimentaria, que para agosto del año pasado se estimó en 978.47 pesos en el medio urbano y de 683.82 pesos en el rural.

Esto significa que en 2010 más de 21.1 millones de mexicanos no tenían el ingreso suficiente para alimentarse, de los cuales 41.8 por ciento sobrevivían en las zonas urbanas del país y 58.2 por ciento en el campo.

Sigue la tendencia. Según el índice laboral de la pobreza elaborada por el propio Coneval en el último año la tendencia de la pobreza sigue siendo a la alza. A septiembre pasado éste repuntó 4.7 por ciento a pesar de que la economía crece y se generan más empleos en el sector formal.

Mientras el costo de la canasta alimentaria se elevó 2.4 por ciento y la correspondiente a la pobreza 3.3 por ciento, los ingresos laborales per cápita mensuales de cada hogar se redujeron 0.9 por ciento en términos nominales.

La serie del Índice de la tendencia laboral de la pobreza muestra trimestralmente la tendencia de la proporción de personas que no puede adquirir la canasta alimentaria con el ingreso de su trabajo.

Y aunque este indicador no constituye una medición “oficial” de pobreza, ya que no comprende todas las fuentes de ingreso ni todas las dimensiones de la llamada metodología multidimensional de la pobreza.

El peor de AL. Según la Comisión Económica para América Latina (Cepal), México es uno de los dos países de la región (junto con Honduras) donde la pobreza aumentó en los últimos años como consecuencia del impacto de la reciente crisis financiera internacional.

En su Panorama Social de América Latina 2011 indica que la tasa de indigentes, también llamada pobreza extrema e integrada por quienes no cuentan con el ingreso para satisfacer sus necesidades, pasó de 11.2 a 13.3 por ciento de la población total en el mismo periodo.

Alicia Bárcena, secretaria Ejecutiva de la Cepal, consideró que este retroceso en la lucha contra la pobreza se debe a la fuerte caída económica registrada en 2009. Esto porque la tasa había registrado importantes reducciones al pasar de 41.1 por ciento en 2000 a 34.8 poco antes del impacto de la crisis.




Fuente: La Razón