Unos 80 estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa bloquearon durante una hora el cruce de avenida Insurgentes y Paseo de la Reforma en demanda de que el Congreso de Guerrero ordene una investigación para sancionar a los policías responsables del asesinato de dos alumnos de esa escuela, cometido el lunes pasado en la Autopista del Sol, y someta a juicio político al gobernador de la entidad, Ángel Aguirre Rivero.
Poco después de las 11 de la mañana los jóvenes comenzaron a agruparse para iniciar el bloqueo, frente al Monumento a la Madre, donde denunciaron con mantas y consignas el homicidio de Alexis Herrera y Gabriel Echeverría, cuyos responsables no han sido identificados.
Los estudiantes permitieron el paso intermitente del Metrobús, y aunque hubo roces con automovilistas, no hubo incidentes de gravedad.
Con el apoyo de activistas de colectivos de la ciudad de México, los estudiantes reiteraron su petición de aumento a la matrícula y el presupuesto de las normales, así como el fortalecimiento de dicho proyecto educativo para evitar su desaparición.
Alrededor de las 12:15 de la tarde levantaron el bloqueo y realizaron una marcha sobre Reforma hasta el Hemiciclo a Juárez. Después se dirigieron al Palacio de Bellas Artes, donde una comisión del gobierno capitalino les anunció que mañana (lunes) serán recibidos por los integrantes de la mesa directiva del Congreso de Guerrero.
Un estudiante, quien prefirió no decir su nombre por motivos de seguridad, informó que seguirán gestionando una entrevista con legisladores federales para insistir en el juicio político contra Aguirre.
Denunció que policías ministeriales han tratado de sacar por la fuerza de un hospital de Chilpancingo a uno de los estudiantes heridos durante la represión del lunes pasado, Édgar David Espíritu Olmedo –quien no está en condiciones físicas para salir–, pero hasta el momento los familiares del joven lo han impedido.
“El panorama aún es muy difícil en Guerrero. Ya se rompió el diálogo con el gobernador, y el hecho de que haya removido a algunos funcionarios realmente no significa nada, porque con eso no recobran la vida nuestros compañeros”, señaló.
Anunció más movilizaciones en el Distrito Federal y Guerrero en los próximos días, y advirtió que la represión contra las normales rurales y el movimiento social en general está entrando en una fase más brutal. “Esto apenas comienza; por eso hacemos un llamado a las organizaciones populares a que tomen sus medidas de seguridad, porque esto va a venir muy fuerte”.
Fuente: La Jornada
