Los encapuchados fueron repudiados por la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) y Morena, evitando enfrentamientos y desmanes, durante la marcha para conmemorar que Enrique Peña Nieto asumió hace un año la presidencia.
Así lo aseguró el secretario de Gobierno del Distrito Federal, Héctor Serrano, quien dijo que diálogo con los líderes de las organizaciones como Martín Esparza del SME, y Rubén Núñez de la CNTE, para advertirles que ellos serían los responsables directos de cualquier desmán en la marcha.
Por esa razón, los contingentes recibieron la instrucción de repudiar al reducido, y bien identificado, grupo de anarcos que en todo momento quiso colarse a la marcha del mitin.
"En la marcha ningún incidente se generó, los anarquistas anduvieron buscando colarse a la marcha, y al mitin, pero todo salió bien, porque hicimos un trabajo de concertación, hablamos con todos los líderes, y los responsabilizamos de lo que ocurriera en la marcha, hablamos con Martín Esparza y Rubén Núñez, con todos, lo que permitió tener saldo blanco", dijo.
"Los anarquistas fueron repudiados".
Serrano indicó que hubo presencia policiaca discreta con 4 mil 706 elementos de las policías de Proximidad, Metropolitana (Granaderos), de Tránsito, Bancaria e Industrial, Auxiliar, personal de la Subsecretaría de Derechos Humanos, Enlace Institucional, Inspección policial y Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM).
Pero esa presencia sirvió para mantener el orden, además, se contó con presencia de integrantes de la Comsión de Derechos Humanos del DF.
"Todo marchó en ruta, sin ningún incidente, los contingentes de policías estuvieron a la expectativa, porque siempre hubo vigilancia, pero discreta para evitar confrontaciones".
La Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) informó que realizó tareas de observación y acompañamiento en las movilizaciones, por lo que instaló tres unidades móviles.
Fuente: Milenio| ILICH VALDEZ
