La reestructuración interna de la agencia va de la mano de un fuerte proceso de depuración, con el que 500 agentes saldrán de la institución en los próximos días .
Bajo el nombre de “Proyecto Fénix”, la Procuraduría General de la República (PGR) prepara una reestructuración y depuración de la Agencia Federal de Investigación (AFI).
El objetivo del proyecto es aumentar las capacidades de los agentes adscritos a la AFI y de la Policía Federal Ministerial, que actualmente encabeza el comisario Vidal Diazleal Ochoa, y llevar a la corporación un esquema de trabajo similar al del cuerpo de Alguaciles de Estados Unidos (US Marshals).
De acuerdo con las fuentes consultadas del gobierno federal, la reestructuración implicaría un proceso de depuración gradual, en el que unos 500 elementos serán separados de la corporación. Hasta la fecha han sido dados de baja 110 por no haber cumplido con los exámenes de control de confianza.
Bajo la administración de la procuradora Marisela Morales se definió una nueva visión para la AFI centrada en seis ejes: cumplimentación de mandamientos judiciales y ministeriales, localización y aseguramiento de fugitivos de la justicia extranjera, conducción y administración de los centros federales de arraigo, protección a víctimas y testigos colaboradores, operar sistemas de intercepción aérea, marítima y terrestre, y seguridad institucional y protección de funcionarios.
Entre sus funciones, la AFI es la institución encargada de investigar y perseguir a los responsables de la comisión de delitos federales y de aquellos del fuero común que afectan la seguridad nacional o de los que sean atraídos por el ámbito federal.
“Los agentes de la Policía Federal Ministerial, como auxiliares de la autoridad judicial y bajo la actuación directa del agente de Ministerio Público Federal, se coordinan con las instituciones policiales de los tres órdenes de gobierno, federal, estatal y municipal, para perseguir a quienes infrinjan la ley.
“Con estos ejes de actuación se focalizan los recursos al cumplimiento efectivo de las atribuciones de la AFI”, señala la Procuraduría General de la República en su V Informe de labores.
El modelo adoptado, según las fuentes consultadas, es similar al trabajo que realizan los US Marshals en Estados Unidos, el cual, además, permitirá a los agentes mexicanos realizar mayores labores de investigación del delito.
Depuración
La reestructuración interna de la agencia va de la mano de un fuerte proceso de depuración, con el que 500 agentes saldrán de la institución en los próximos días, por no haber acreditado sus exámenes de control de confianza o debido, en su caso, a ausencias laborales.
Hasta agosto del presente año, la Agencia Federal de Investigación (AFI) o Policía Federal Ministerial (PFM) contaba con un personal de tres mil 741 trabajadores, según datos estadísticos de la propia PGR.
Al estilo EU
Los US Marshals, una de las agencias de seguridad más antiguas y más versátiles de Estados Unidos, cuentan con 94 oficinas en toda la Unión Americana y su titular es directamente nombrado por el presidente y aprobado por el Congreso estadounidense.
Los alguaciles sirven como oficiales de los tribunales federales, y son responsables de la seguridad y mantener el orden en los tribunales federales y otras áreas de la Corte.
Los oficiales llevan a cabo las órdenes judiciales, pero también responden a situaciones de emergencia, tales como disturbios civiles en los casos en que haya violación a las leyes federales o amenazas a la propiedad federal.
Entre sus atribuciones, de acuerdo con la información institucional, los US Marshals detienen a los fugitivos federales, incautan las propiedades adquiridas por los delincuentes a través de actividades ilícitas, resguardan los traslados de reos federal y tienen a su cargo la responsabilidad de operar el Programa de Protección a Testigos.
En el año 2010, los US Marshals capturaron a más de 36 mil 100 fugitivos federales y arrestaron a 81 mil 900 fugitivos estatales y locales, en cumplimiento de 108 mil 200 órdenes de aprehensión por delitos graves del fuero estatal y local.
Fuente: El Universal
