Funcionarios coinciden en que la falta del líquido puede detonar en una crisis de gobernabilidad
Por agua los capitalinos secuestran las pipas para obligarlos a abastecer en sus domicilios y cierran calles como protesta y medida de presión a sus gobernantes.
Por cerrar las válvulas que impiden que el líquido llegue a las casas, el PRD presentó la primera denuncia ante la Procuraduría General de Justicia “contra quienes resulten responsables”; sin embargo, acusa a militantes de Morena de encabezar este boicot.
Algunos funcionarios capitalinos coinciden en que la falta del líquido en la Ciudad de México puede detonar una verdadera crisis de gobernabilidad.
En Santa María Aztahuacan, Iztapalapa, es común que las familias compren tinacos, botes y cubetas para tenerlos como reserva para apartar agua, ya que el líquido les llega por tres horas.
1,500 Pesos cuesta la pipa de 10 mil litros
Es común que, después de una semana de absoluta sequía, los hombres salgan a la calle a rastrear las pipas que manda la delegación para treparse a la brava y “sugerirle” al conductor a qué zona dirigirse y cuáles casas abastecer.
Cuando el agua pública se agota, los distribuidores explotan esta sequía y llegan a vender una pipa de 10 mil litros de 900 pesos (precio promedio) hasta en mil 500 al cabo que a la gente le urge el agua.
60 Colonias reciben el líquido por tandeo
Casi medio millón de capitalinos que viven en 68 de las 293 colonias de la delegación Iztapalapa se han acostumbrado a recibir agua por tandeo, es decir, a través de pipas que suben una o dos veces a la semana si bien les va.
LA PRIMERA DENUNCIA
La ex delegada en Iztacalco y hoy diputada local, Elizabeth Mateos acudió a la Procuraduría capitalina a denunciar el cierre de al menos nueve válvulas en esa demarcación que afectan el abasto a las colonia Barrio de Zapotla, Los Reyes, San Miguel, San Pedro, San Francisco Xicaltongo y Juventino Rosas.
altongo y Juventino Rosas. “Es de mencionar como antecedente que a principios del año en curso, personal de la delegación Iztacalco, personal adscrito a la Jefatura de Unidad Departamental de Agua Potable y Tratata de la Dirección General de Servicios Urbanos empezaron a reportar anomalías en el suministro que abastece de agua potable a diversas colonias y barrios que se ubican dentro de la delegación, derivado del cierre no autorizado de válvulas de las redes de agua potable”, precisó en la denuncia que ingresó a la Procuraduría.
El 15 de febrero se dio una manifestación por la falta del servicio y al acudir, personal de Sacmex, acordándose que se realizaría una revisión al día siguiente, al proceder a revisar el sistema se encontró que 5 válvulas estaban cerradas
“Se me hace inhumano y perverso, lo que están haciendo en otras delegaciones cerrando las válvulas de agua para evitar que llegue el líquido”
- Elizabeth Mateos Diputada local
La legisladora acusó a militantes de Morena de utilizar la falta de agua como una bandera política.
“Esto genera una sospecha de que hay un sabotaje con intencionalidad política pues el bloqueo continuó por cuatro horas más. Son activistas del partido Morena”.
Entre los activistas de Morena que fueron identificadas se encuentran David “N”, Pablo Domínguez, Aidé Valencia Martínez y Valentín Rivera.
En respuesta a esta acusación, Morena recordó que desde octubre pasado presentó a la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México (ALDF) una iniciativa para sancionar el cierre de válvulas.
Además anunció que presentarán ante la Fepade denuncias por manejo político del agua en Iztapalapa.
Habitantes: la manipulación de válvulas la realizan autoridades y sus grupos políticos
Durante la época de estiaje, en Coyoacán, Iztapalapa e Iztacalco hay quienes abren los registros de la red de agua potable para surtirse del líquido ante el desabasto, pero no para frenar el suministro, aseguraron habitantes de dichas demarciones.
En un recorrido por diversos puntos de esas demarcaciones, los vecinos señalaron que la manipulación de las válvulas la realizan las propias autoridades delegacionales y sus grupos políticos, como ocurre desde hace cuatro años en Los Pedregales, Coyoacán, donde se ha denunciado al Sistema de Aguas de la Ciudad de México por el cierre intencional para usar de manera política el reparto del agua mediante pipas.
Junto a un pozo de agua, en San Ricardo y San Hermilo, en el Pedregal de Santa Úrsula, se encuentra una de las válvulas, que a decir de los pobladores es manipulada de manera constante.
Cuando la gente ya se harta es cuando llegamos al bloqueo de las calles, porque de otra manera no tenemos agua, expuso la señora Teresa Cruz.
En Santa María Aztahuacán, Iztapalapa, los vecinos, que ayer bloquearon la calzada Ermita Iztapalapa, en su cruce con la calle 17, denunciaron una situación similar, al señalar que desde hace dos años se quejaron porque algunos líderes políticos cerraban las válvulas para presionar a la gente, y en otros casos se utilizó como castigo.
La comunidad se opuso a la perforación de un pozo y nos dejaron sin agua, apuntaron.
En otros puntos, donde el gobierno capitalino denunció el cierre intencional de válvulas para afectar el suministro del agua, entre ellos el de Andrés Molina Enríquez y Normandía, en San Andrés Tetepilco, Iztapalapa, los residentes rechazaron que exista tal manipulación.
Hace dos meses se hizo una manifestación, mandaron pipas, pero el problema del desabasto no lo han arreglado, apuntaron.
Sobre la calle Oriente 110, en la colonia Ramos Millán, Iztacalco, los registros incluso se encuentran soldados.
Desde el año pasado, durante el estiaje, la gente los abrió para abastecerse, pero vino la delegación, remitió a varios al Ministerio Público y los selló. No hay manera de abrirlos, expresaron los vecinos, quienes señalaron que a un lado se encuentran las cámaras de videovigilancia.
Ayer, autoridades de las delegaciones Magdalena Contreras y Coyoacán interpusieron, por separado, denuncias ante la Procuraduría General de Justicia capitalina; en el primer caso, por presuntos actos de sabotaje y vandalismos que afectaron el suministro de agua potable en varias colonias, y en el segundo, por la manipulación de válvulas.
Fuente: Reporte Indigo y La Jornada