A 7 años de que el panista Felipe Calderón extinguiera Luz y Fuerza del Centro, los gastos para el erario relacionados con esa paraestatal no cesan: el Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (Sae) –encargado del proceso de liquidación y venta de activos– aún paga servicios de vigilancia y custodia.
Hasta el 31 de diciembre estuvo vigente el contrato LFCL-CSGA-04-01-16 con los Cuerpos de Seguridad Auxiliares del Estado de México (Cusaem), hasta por 52 millones 140 mil pesos –de los cuales había pagado, a septiembre, 12 millones 249 mil 188 pesos–, revela información de la dependencia. Los gastos se derivan, sobre todo, del servicio de vigilancia a los bienes que ya han sido subastados pero no entregados a sus dueños.
En los 7 años del proceso de liquidación, Cusaem ha obtenido 11 contratos con cargo al erario de la extinta Luz y Fuerza del Centro, por más de 430 millones 500 mil pesos en total.
El primero en 2010, por 126 millones; para 2011 fueron cuatro contrataciones, por 93 millones 239 mil pesos en total. En 2012 fueron dos contratos, por 79 millones 938 mil; en 2013 uno, por 51 millones 131 mil pesos; en 2014 uno, por 60 millones 548 mil; al año siguiente uno, por 28 millones 984 mil, y en 2016, el de los 12 millones.
Consultado respecto de los objetivos de estos contratos y por del porqué se eligió a Cusaem para estos servicios, el Sae asegura a Agenda de la Corrupción que en 2009 tuvo que tomar control de todas las instalaciones y fue de manera inmediata. “Tuvimos que contactar algunas de las empresas que estaban otorgando el servicio [de custodia] en ese momento. Básicamente lo que tenían en resguardo eran todos los bienes que eran de Luz y Fuerza: instalaciones, inmuebles”.
El Sae afirma que antes de la extinción de Luz y Fuerza, Cusaem ya daba el servicio y lo que se hizo fue dar continuidad. “Ya en conocimiento de los bienes que se tenían bajo vigilancia lo que se hizo fue dar continuidad. Había disposiciones establecidas para poder hacer contrataciones de empresas para manejarlas directamente. En este sentido lo que hicimos fue darle continuidad al servicio”.
El objetivo siempre ha sido la vigilancia de los activos, excepto en el caso del contrato de 2016: la seguridad también se destinó al proceso de pago de las liquidaciones de los trabajadores. “Sobre el mismo contrato vigente [en 2016] se pidió el servicio de apoyo para llevar a cabo el pago a los trabajadores en el World Trade Center”.
Respecto de la adjudicación directa de los contratos, el Sae explica que al ser Cusaem una entidad pública, no es sujeta a licitación. “Todas las entidades públicas se contratan directamente, no por licitación”.
El Servicio de Administración y Enajenación de Bienes cuenta que cuando tomó la liquidación de Luz y Fuerza, todos los servicios de vigilancia los prestaban las entidades estatales: Puebla, Hidalgo, Guerrero, Morelos, Estado de México y Ciudad de México.
“Cada organismo de seguridad de cada una de las entidades eran los que prestaban el servicio. Entonces lo que se hizo fue dar continuidad que recibían en la liquidación en la etapa de operación. Y lo que pasa es que a partir de 2011 ya muchas entidades no quisieron participar en la vigilancia. Se retiraron y entonces tuvimos que irnos con Cusaem, para la mayoría de los bienes”.
De acuerdo con las autoridades consultadas, aún se paga custodia por algunos inmuebles en Hidalgo y en la Ciudad de México.
Al consultarle al Sae si fue Cusaem el que tenía el costo más alto, la autoridad indica que los otros cuerpos policiacos estatales son los que no quisieron mantener los costos y se retiraron, porque tenían costos más altos que Cusaem.
“Cusaem sí nos respetó los costos de 2011 y seguimos con ellos. Y resultaron ser los más convenientes porque son los que mantuvieron los precios sin elevarse.”
En este 2017 se podría firmar un nuevo contrato, según se desprende de los datos del Sae. Según la autoridad, “lo que estamos haciendo es acabar de entregar los bienes. Ya entregamos los inmuebles, ahora nada más tenemos algunos bienes en resguardo y los edificios donde estamos atendiendo la liquidación. Ahí fundamentalmente hay que recordar que el año pasado se decidió que todos los bienes fueran entregados al Indabin [Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales]. Hay algunos, la gran parte, que fueron destinados a la CFE [Comisión Federal de Electricidad]; otros que se están manejando como parte del acuerdo que tuvo la Secretaría de Gobernación para que el Sindicato Mexicano de Electricistas tuviera en uso: que son fundamentalmente las plantas generadoras, y los otros inmuebles que se están manejando directamente con el SME”.
El Sae agrega: “Lo que nos queda que está resguardando Cusaem son básicamente bienes muebles que ya están vendidos pero que por su volumen, son volúmenes muy grandes, son miles de toneladas que se tienen que entregar, a quien las compra le es muy difícil sacarlos en una sola vez; entonces tiene que sacarlos en forma programada; y Cusaem tiene bajo su resguardo todos esos bienes que están pendientes de entregar a compradores. Ese es fundamentalmente el servicio que prevalece actualmente”.
Se trata de bienes que ya fueron subastados. El Sae y los compradores que ganaron las subastas hacen una programación para la entrega, que considera varios meses. “En tanto se entregan, siguen bajo resguardo de la empresa de seguridad y vigilancia”.
La vigencia, por tanto, depende de esos tiempos. “En tanto se van entregando los bienes el contrato se va haciendo más chico el contrato. Lo que podría quedar al final sería el resguardo de los inmuebles donde tenemos a la gente trabajando en el proceso de liquidación”.
Al parecer a alguien no sólo se le ha olvidado aplicar la “austeridad” que tanto pregona la actual administración federal, sino que nos carga el multimillonario costo de algo que desde hace 7 años dejó de ser público. ¿Por cuánto tiempo más seguiremos pagando la vigilancia de bienes privatizados?
Nancy Flores