lunes, 11 de febrero de 2013

Pemex debe restructurarse pero ser de la Nación: Fluvio Ruiz

La mayor participación privada no es la panacea para la petrolera, sostiene el consejero

Se tienen que redoblar los esfuerzos en seguridad industrial para evitar accidentes, afirma

Pemex Petroquímica sufre por el control impuesto para que no haga competencia a la IP, dice

Fluvio Ruiz, consejero profesional independiente de Petróleos Mexicanos (Pemex), rechazó que la mayor participación de inversión privada nacional y extranjera en la paraestatal sea la panacea. Un Pemex propiedad del Estado restructurado y reintegrado es el mejor instrumento que tiene esta Nación, sostuvo.

En entrevista, el funcionario explicó que con tanta regulación y con un régimen fiscal tan confiscatorio, con un esquema que no le permite desarrollarse plenamente, donde incluso cuando tiene mayor capacidad de inversión se le restringe de manera artificial, es muy fácil decir que Pemex está mal.

Hizo una analogía con el texto Albatros, del poeta y crítico francés Charles Pierre Baudelaire, y dijo que a Pemex se lo trata como a ese albatros que, después de que los marineros lo capturan y golpean, lo exponen en cubierta, y a esa ave majestuosa la hacen ver como inútil y hasta ridícula.

Por ello, insistió que a Pemex como a ese albatros hay que dejarlo que se recupere, pongámosle tablillas, restablezcamos sus alas y dejémosle volar, y yo estoy convencido de que un Petróleos Mexicanos propiedad de la Nación restructurado y reintegrado es el mejor instrumento que tiene esta Nación.

Sobre los índices de siniestralidad, con dos accidentes graves en menos de seis meses, Ruiz Alarcón consideró que esto habla de que se tienen que redoblar los esfuerzos en seguridad industrial, aunque aclaró que los índices de frecuencia de accidentes están muy por debajo de otras empresas internacionales.

Estamos dentro de los estándares, aunque eso no le dice nada a la gente ni devuelve la vida a las personas. Yo planteé hace varios meses en los consejos de administración que el mejor momento de Pemex en términos de seguridad fue en 2010 y de ahí empezamos a tener accidentes. Esto nos obliga a ver las paradojas, porque justo el miércoles, un día antes de la explosión, estábamos en un congreso para ver la seguridad en Pemex, expuso.

En ese congreso ya se había planteado que se tenía que retomar ese tema con ahínco y los procedimientos de seguridad con la misma seriedad. Tal vez estábamos en la complacencia de que teníamos excelentes índices, y ahora habrá que revisar los procesos, dijo.

Al preguntarle sobre cuáles son las áreas de interés del sector privado para participar en la industria petrolera en segmentos aún reservados por la Constitución a la Nación, respondió: Ahora de Baudelaire nos vamos a Jaime Sabines: no lo sé de cierto, pero supongo. Por lo que se ha planteado hay un interés particular de los capitales privados por explotar el gas lutita. Por ejemplo, en el pacto se plantea también refinación, pero mientras tengamos esta estructura de mercado, estos precios regulados, yo no veo que haya interés o posibilidades del sector privado.

–¿Los capitales privados le van a apostar más al gas que al petróleo?


–Aunque aparentemente no es rentable con estos precios, pero hay que recordar que las proyecciones se tienen que hacer a mediano y largo plazos, si no, nos puede pasar a la inversa. Hace algunos días escuchaba al ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas y me gustó mucho su analogía, la diferencia entre el gas asociado o gas seco, en cualquiera de sus modalidades, el gas shale es como tener una veta de oro o encontrar pepitas de oro en el río. Entonces es lo mismo, es oro; está en piedras de lutitas, pero es gas. En esa medida la Constitución establece claramente que eso debe ser explotación exclusiva de la Nación y yo estoy de acuerdo.

Sobre la petroquímica, que lleva más de 20 años abierta a la inversión privada, Fluvio Ruiz planteó que es completamente equivocado que por el hecho de que haya un sector económico abierto a la iniciativa privada se inhiba la actividad de los organismos públicos que participan en ese sector. Pemex Petroquímica ha sufrido por el terrible control presupuestal impuesto desde hace 20 años, con la lógica de que no le haga tanta competencia a la iniciativa privada. El proyecto Etileno XXI está bien, pero lo podría haber hecho Pemex Petroquímica si tuviéramos una perspectiva más integral de la industria. Si no estuviéramos centrados en el rentismo inmediatista del hidrocarburo. Pemex Exploración y Producción (PEP), como productora de crudo, es la cuarta empresa del mundo, y Pemex Petroquímica es una empresa que sufre mayores consecuencias porque desde el Estado no se la ha apuntalado. Creo sinceramente que tenemos que encontrar la fórmula para que un órgano público que participa en ese sector pueda hacerlo en igualdad de circunstancias que las compañías privadas con las que compite, sostuvo.

El consejero profesional independiente de Pemex se manifestó en contra de que se liberalice y se permita la inversión privada en petroquímica básica.

Por su parte, en la petroquímica secundaria consideró que el Estado debe hacer más por sus organismos. Por ejemplo, en Francia está abierto el sector eléctrico pero no entra nadie a competir con Electricidad de Francia, porque esta empresa tiene todo el respaldo del gobierno francés y por eso me parece inaudito que el Estado mexicano no apuntale a Pemex Petroquímica.

Finalmente, descartó que la explosión en el edificio B2 del complejo administrativo de Pemex, ocurrida el 31 de enero, pueda retrasar el proceso de reforma en la paraestatal. El proceso de reforma tiene sus propios espacios, tiempos y actores. Creo que ellos traen una dinámica relacionada con los partidos políticos, con el Congreso y las negociaciones con este grupo que da seguimiento al Pacto por México, y creo que la reforma como tal se dirime en esos ámbitos y con esos actores. Es un evento que le da más visibilidad a ese tema.




Fuente: La Jornada | Israel Rodríguez