Petróleos Mexicanos (Pemex) cerrará el año importando la mitad de la gasolina y la tercera parte del diésel que se consume en el país, esto es 350,000 barriles diarios de gasolina y 100,000 barriles diarios de diésel.
Moisés Orozco, subdirector comercial de Pemex Refinación, dijo a El Economista que actualmente existe una demanda de 700,000 barriles diarios de gasolina utilizada tanto por el sector comercial como por los consumidores domésticos, más una demanda de 300,000 barriles de diésel para los cuales dejó de ser suficiente la producción de Pemex, por lo que las importaciones van en aumento.
“Como las importaciones son tan grandes y seguirán creciendo, es muy importante considerar todos los proyectos de infraestructura que se estén haciendo para poder revertir esto”, agregó con respecto a la reconfiguración de la refinería de Minatitlán, inaugurada en mayo pasado, así como el proyecto de la Refinería Bicentenario, en Hidalgo, del cual se ha anunciado que comenzarán las licitaciones para la construcción en la primera mitad del 2012.
“En la concepción de inversión de Pemex Refinación tienen que estar los nuevos proyectos que se van a construir, pero también tiene que pensarse en la infraestructura para poder mover todo esto, es decir, ductos, terminales, vehículos y lo que haga falta”, aseveró el funcionario.
Por otra parte, aseguró que las ventas de la filial Refinación cerrarán el año con un crecimiento de 2% en gasolina a pesar de que las seis refinadoras que operan en el país trabajan a su máxima capacidad. Las ventas de diésel tendrán un crecimiento de 4 por ciento.
Contratos de primera mano
En lo que se refiere a la relación contractual con las estaciones de servicio, más de 93% de los dueños de las mismas ya cuenta con contratos de suministro de primera mano.
Explicó que esto significa que 9,300 gasolineras trabajarán directamente con la autoridad reguladora -separando la autoridad de Pemex- para que la Procuraduría Federal del Consumidor revise y en lo relativo a gasolinas, turbosinas y diésel, la Secretaría de Energía regule los volúmenes y comercialización, mientras que para combustoleos y naftas lo haga la Comisión Reguladora de Energía, de manera que Pemex Refinación fungirá como proveedor del combustible únicamente.
Según él, habrá un total de 150 estaciones que no firmarán los contratos, alegando que se abrirá un canal de venta de productos secundarios a particulares ajenos a Pemex.
Fuente: El Economista
