Independientemente de si merece ser santo, varios aspectos de su vida son cuestionables
Teólogos e integrantes del Observatorio Eclesial consideraron que la beatificación de Juan Pablo II más que nada es una estrategia político-religiosa para "levantar el ánimo y la fe de una iglesia que está decaída".
Pocas horas antes de que el papa Benedicto XVI beatificara a su antecesor, quien murió el 2 de abril de 2005, Jaime Laines, teólogo del Centro Antonio de Montesinos, señaló en entrevista que, sin cuestionar si Juan Pablo II merece ser llevado a la antesala de la santidad, lo cierto es que durante su pontificado hubo diversos aspectos cuestionables, como su cercanía con el fundador de la Legión de Cristo, el sacerdote pederasta Marcial Maciel; con regímenes dictatoriales y su rechazo a la teología de la liberación.
Gabriela Juárez, del Observatorio Eclesial, señaló que el hecho de que en el avión presidencial (que el viernes por la noche partió rumbo al Vaticano) hayan ido obispos "envía un mensaje en el que se entiende que hay una unión entre la Iglesia y el Estado, justamente lo que se ha criticado a Felipe Calderón".
Por otra parte, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) informó ayer que el Vaticano habilitó una página electrónica dedicada a Juan Pablo II, la cual cuenta con 500 fotos, 30 videos y 400 pensamientos en varios idiomas.
Precisó que la página web “tiene en cuenta todo tipo de tecnología: PC, laptop, dispositivos móviles, smartphone, iPhone y iPad para permitir el mejor uso posible, sobre todo por los peregrinos, que de esta manera pueden acceder al sitio desde donde se encuentren y desde cualquier dispositivo, y así estar siempre acompañados durante la peregrinación –en el día de la beatificación y los sucesivos– por las imágenes y las palabras del beato Juan Pablo II y rezar con él”.
También, la arquidiócesis de México dio a conocer que como homenaje al nuevo beato colocó pendones con su imagen en la Catedral Metropolitana de la ciudad de México, donde se destaca como un "Papa amigo".
En tanto, en la Basílica de Guadalupe, desde las 13 horas de ayer y hasta la mañana de hoy se realizaron actividades relativas a la beatificación de Karol Wojtyla y a través de pantallas gigantes se siguieron todos los acontecimientos en vivo desde el Vaticano, incluida la ceremonia de beatificación que ocurrió (para México) a las tres de la mañana de hoy.
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Carta enviada en 1956 al Vaticano por el obispo Sergio Méndez Arceo en la que da cuenta de los abusos cometidos por Maciel
La primera actividad fue la participación de México –desde la Basílica de Guadalupe– en el Rosario Mundial; al país le tocó el cuarto misterio. Fueron cinco los centros religiosos que se sumaron a este rezo por haber sido significativos durante el pontificado de Juan Pablo II. Además de México participaron Polonia, Portugal, Tanzania y Líbano.
Luego, el rector de la Basílica de Guadalupe, Enrique Glennie, inauguró y bendijo la plazoleta en honor al pontífice (localizada a un costado del recinto religioso), ceremonia en la que dijo esperar que esa beatificación "sea motivo de superación" para los católicos.
Acompañado por el Cabildo Guadalupano y el obispo auxiliar de la arquidiócesis de México, Armando Colín, Glennie aseguró que Juan Pablo II "está vivo en el recuerdo y en el corazón" de los mexicanos y de los católicos del mundo; indicó que no estarán contentos hasta verlo reconocido como santo.
Durante la ceremonia se expuso una reliquia de Juan Pablo II (una sotana que utilizó en una de las cinco visitas que realizó a México). Posteriormente, adentro de la Basílica se estableció una exposición de diversas reliquias del ahora beato, entre ellas la silla que usó en la ceremonia de canonización de Juan Diego, un rosario, escapularios y la casulla que empleó cuando ofició misas en el país.
Por la noche, en el atrio de la Basílica, donde ondeaban banderas mexicanas y del Vaticano, y donde se instalaron un escenario y pantallas, más de 7 mil participaron en la velada juvenil, durante la cual se transmitió en vivo la ceremonia de beatificación.
A través de sus cuentas de Facebook y Twitter, el cardenal Norberto Rivera Carrera, desde el Vaticano habló de la beatificación de Juan Pablo II y pidió por la paz y la concordia en México. El jerarca elevó sus oraciones a la Virgen de Guadalupe y pidió "por la paz y la concordia en nuestro país". Aseguró que "Roma es hoy el corazón del mundo, y nuestro corazón está aquí, en la víspera festiva de la beatificación del Papa que tanto amó a nuestro país", y envió "un cariñoso saludo y mis oraciones por México y mi amada arquidiócesis, en la espera de la proclamación solemne de Juan Pablo II como bienaventurado".
Teólogos e integrantes del Observatorio Eclesial consideraron que la beatificación de Juan Pablo II más que nada es una estrategia político-religiosa para "levantar el ánimo y la fe de una iglesia que está decaída".
Pocas horas antes de que el papa Benedicto XVI beatificara a su antecesor, quien murió el 2 de abril de 2005, Jaime Laines, teólogo del Centro Antonio de Montesinos, señaló en entrevista que, sin cuestionar si Juan Pablo II merece ser llevado a la antesala de la santidad, lo cierto es que durante su pontificado hubo diversos aspectos cuestionables, como su cercanía con el fundador de la Legión de Cristo, el sacerdote pederasta Marcial Maciel; con regímenes dictatoriales y su rechazo a la teología de la liberación.
Gabriela Juárez, del Observatorio Eclesial, señaló que el hecho de que en el avión presidencial (que el viernes por la noche partió rumbo al Vaticano) hayan ido obispos "envía un mensaje en el que se entiende que hay una unión entre la Iglesia y el Estado, justamente lo que se ha criticado a Felipe Calderón".
Por otra parte, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) informó ayer que el Vaticano habilitó una página electrónica dedicada a Juan Pablo II, la cual cuenta con 500 fotos, 30 videos y 400 pensamientos en varios idiomas.
Precisó que la página web “tiene en cuenta todo tipo de tecnología: PC, laptop, dispositivos móviles, smartphone, iPhone y iPad para permitir el mejor uso posible, sobre todo por los peregrinos, que de esta manera pueden acceder al sitio desde donde se encuentren y desde cualquier dispositivo, y así estar siempre acompañados durante la peregrinación –en el día de la beatificación y los sucesivos– por las imágenes y las palabras del beato Juan Pablo II y rezar con él”.
También, la arquidiócesis de México dio a conocer que como homenaje al nuevo beato colocó pendones con su imagen en la Catedral Metropolitana de la ciudad de México, donde se destaca como un "Papa amigo".
En tanto, en la Basílica de Guadalupe, desde las 13 horas de ayer y hasta la mañana de hoy se realizaron actividades relativas a la beatificación de Karol Wojtyla y a través de pantallas gigantes se siguieron todos los acontecimientos en vivo desde el Vaticano, incluida la ceremonia de beatificación que ocurrió (para México) a las tres de la mañana de hoy.
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Carta enviada en 1956 al Vaticano por el obispo Sergio Méndez Arceo en la que da cuenta de los abusos cometidos por Maciel
La primera actividad fue la participación de México –desde la Basílica de Guadalupe– en el Rosario Mundial; al país le tocó el cuarto misterio. Fueron cinco los centros religiosos que se sumaron a este rezo por haber sido significativos durante el pontificado de Juan Pablo II. Además de México participaron Polonia, Portugal, Tanzania y Líbano.
Luego, el rector de la Basílica de Guadalupe, Enrique Glennie, inauguró y bendijo la plazoleta en honor al pontífice (localizada a un costado del recinto religioso), ceremonia en la que dijo esperar que esa beatificación "sea motivo de superación" para los católicos.
Acompañado por el Cabildo Guadalupano y el obispo auxiliar de la arquidiócesis de México, Armando Colín, Glennie aseguró que Juan Pablo II "está vivo en el recuerdo y en el corazón" de los mexicanos y de los católicos del mundo; indicó que no estarán contentos hasta verlo reconocido como santo.
Durante la ceremonia se expuso una reliquia de Juan Pablo II (una sotana que utilizó en una de las cinco visitas que realizó a México). Posteriormente, adentro de la Basílica se estableció una exposición de diversas reliquias del ahora beato, entre ellas la silla que usó en la ceremonia de canonización de Juan Diego, un rosario, escapularios y la casulla que empleó cuando ofició misas en el país.
Por la noche, en el atrio de la Basílica, donde ondeaban banderas mexicanas y del Vaticano, y donde se instalaron un escenario y pantallas, más de 7 mil participaron en la velada juvenil, durante la cual se transmitió en vivo la ceremonia de beatificación.
A través de sus cuentas de Facebook y Twitter, el cardenal Norberto Rivera Carrera, desde el Vaticano habló de la beatificación de Juan Pablo II y pidió por la paz y la concordia en México. El jerarca elevó sus oraciones a la Virgen de Guadalupe y pidió "por la paz y la concordia en nuestro país". Aseguró que "Roma es hoy el corazón del mundo, y nuestro corazón está aquí, en la víspera festiva de la beatificación del Papa que tanto amó a nuestro país", y envió "un cariñoso saludo y mis oraciones por México y mi amada arquidiócesis, en la espera de la proclamación solemne de Juan Pablo II como bienaventurado".
http://www.jornada.unam.mx/2011/05/01/index.php?section=politica&article=003n1pol