La SCJN decidió que se dictara nueva sentencia; hubo irregularidades en el proceso
El vendedor de dulces en Nezahualcóyotl, asesorado por el Prodh, espera reparación del daño
Sergio Sánchez Arellano fue encarcelado hace casi ocho años acusado de un asesinato
que no cometió. Con la asesoría legal del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Prodh), su caso llegó a la primera sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que ordenó al noveno tribunal colegiado de circuito, con sede en Ciudad de México –que lo había sentenciado a 27 años y seis meses de prisión–, dictar una nueva sentencia con base en un proceso apegado a derecho, pues hubo irregularidades en su juicio que violentaron sus derechos.
Ayer, ese tribunal colegiado le otorgó un amparo liso y llano al vendedor al no encontrar elementos que lo incriminen en el delito, por lo que obtuvo su libertad y ahora espera la reparación del daño.
El Centro Prodh y Amnistía Internacional (AI) celebraron la liberación de este mazahua, vendedor de dulces en Nezahualcóyotl, estado de México, la cual
supone un triunfo para la justicia y la defensa de los derechos humanos.
Sergio Sánchez fue detenido de manera arbitraria el 29 de marzo de 2010 por policías de investigación de Ciudad de México. Se le acusó de homicidio e intento de robo. La única prueba en su contra fue el testimonio de una mujer que dijo haberlo visto, a 10 metros de distancia, cometer el delito.
AI y el Centro Prodh documentaron que tras ser aprehendido fue incomunicado, golpeado y amenazado para que se inculpara, pero no lo hizo.
Se le condenó a 27 años y medio de prisión
tras un proceso judicial en el que no se respetaron sus garantías a un juicio justo.
En octubre pasado, la Corte encontró fallas en el proceso en su contra. Además, AI documentó el caso en su informe de 2017 Falsas sospechas. Detenciones arbitrarias por la policía en México.
El Centro Prodh celebró su liberación:
Nos congratulamos porque las y los magistrados decidieron dar una sentencia apegada a la resolución de la SCJN y respetuosa de los derechos humanos de Sergio.
Erika Guevara, directora para las Américas de AI, señaló que
las detenciones arbitrarias por la policía son cotidianas en el país y generan espacios de impunidad en que pueden ocurrir más violaciones a los derechos humanos, como la tortura, la desaparición forzada y la ejecución extrajudicial. Su liberación
es un paso para la justicia, aunque, acotó,
aún queda mucho por exigir para garantizar la reparación del daño y para asegurar que casos así no se repitan.
Fuente: La Jornada