Ciudad de México. A doce años de la explosión de la mina Pasta de Conchos, las viudas y deudos de los 65 mineros fallecidos marcharon hoy para exigir el rescate de los cuerpos y justicia.
Como parte de la jornada de protesta los deudos también llevaron a cabo un mitin y una misa celebrada en el Ángel de la Independencia por los sacerdotes Miguel Concha y Raúl Vera. También asistieron diversas organizaciones que han apoyado la demanda del rescate.
En la homilía, los sacerdotes señalaron que no se le ha cumplido la más elemental justicia a los deudos y si el Gobierno Federal tiene una deuda con ellos.
Además esta tarde se instaló el segundo antimonumento en Paseo de la Reforma, a la altura de la Bolsa Mexicana de Valores, para conmemorar a las 65 víctimas que fallecieron dentro de la mina de Pasta de Conchos, en Coahuila.
Gómez Urrutia, perseguido y estigmatizado: AMLO
Andrés Manuel López Obrador, candidato presidencial de Morena, señaló que el líder del sindicato minero Napoleón Gómez Urrutia, candidato del partido al Senado por la vía plurinominal, ha sido perseguido y estigmatizado por la propaganda oficial y oficiosa, como otros dirigentes sociales y políticos.
En Twitter, ante los comentarios que ha generado la postulación, manifestó que siempre ha estado “en contra de las represalias tomadas desde el poder por decisión de los grupos de intereses creados”.
López Obrador compartió un texto donde Pedro Miguel recuerda que Gómez Urrutia ha sido perseguido por los gobiernos de Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto por su defensa de los trabajadores metalúrgicos de Lázaro Cárdenas-Las Truchas y por sus denuncias contra Grupo México (propietaria de la mina Pasta de Conchos) y contra las autoridades laborales del gobierno federal.
También señala a pesar de que las instancias oficiales se negaban a expedir la toma de nota a su favor, el respaldo de las bases sindicales lo ha mantenido en el cargo, incluso en el exilio.
“La persecución llegó al grado de que a principios de 2014 la presidencia de Peña Nieto giró a la Interpol una orden de captura en contra de Gómez Urrutia por un supuesto fraude de 55 millones de dólares en el manejo del dinero sindical. Sin embargo, ese mismo año el Cuarto Tribunal Colegiado en Materia penal canceló la última de las múltiples órdenes de aprehensión que había en su contra, por lo que la “ficha roja” internacional hubo de ser cancelada”, menciona Pedro Miguel.
Destaca premios que ha recibido Gómez Urrutia, quien durante el exilio en Canadá, dice el texto, “ha intensificado la colaboración entre los mineros de ese país y los mexicanos y ha luchado en contra de la voracidad de las empresas mineras canadienses que operan en nuestro país”.
Falló la seguridad, concluye informe sobre Pasta de Conchos
La explosión en la mina Pasta de Conchos, en Coahuila, el 19 de febrero de 2006, “no fue causada por una caprichosa acumulación de gas, sino que se trató de un siniestro evitable ocasionado por un sistema de ventilación insuficiente y por precarias condiciones de seguridad y mantenimiento en que (la empresa) Grupo México –propiedad de Germán Larrea— mantenía sus instalaciones”.
Esa es la conclusión del informe El carbón rojo de Coahuila: Aquí se termina el silencio, elaborado por la organización Familia Pasta de Conchos con el apoyo de la Fundación Heinrich Böll, sección México y el Caribe, que se presentó esta mañana.
De acuerdo con el reporte, en la región carbonífera de Coahuila, desde el año 1900 han perdido la vida tres mil 103 mineros en explosiones y otros siniestros causados por negligencia de las empresas. Un dato a destacar es que de ese total, los únicos cuerpos que no se han recuperado son los de trabajadores de las minas operadas por Grupo México.
Doce años después del siniestro –que dejó 65 mineros muertos, de los cuales no se logró recuperar 63 cuerpos— los familiares de las víctimas continúan con su exigencia de que los restos aún enterrados sean rescatados y que se les otorgue a las familias la reparación correspondiente del daño.
La empresa, denunciaron, no atendió los señalamientos hechos por las autoridades laborales en torno a la inseguridad en la mina, lo que generó la tragedia.
Durante la conferencia en la que se presentó el informe, el obispo de Saltillo, Raúl Vera López, lamentó las precarias condiciones en las que por años han trabajado los mineros en la región, y el país. “Miseria, hambre y muerte es lo que ha acompañado la vida en la minería”.
Indicó que en el caso de la mina de Pasta de Conchos, el incidente se dio por la negligencia de la empresa. Destacó que en su portal de Internet, Grupo México presume que son productores de carbón al menor costo. “Pero hay que aclarar que es al menor costo económico, pero a un alto costo de sangre. ¿Por qué no ponen eso en su página Web?”.
Para el prelado, el dueño de Grupo México, Germán Larrea, merecería estar en la cárcel. Pero no sólo responsabilizó al empresario de esa tragedia. También señaló a los ex mandatarios de Coahuila, los hermanos priístas Humberto y Rubén Moreira; a funcionarios de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social en la época en que se dio el siniestro; y al sindicato minero. “Esto fue provocado por la inmoralidad de empresarios, gobiernos y sindicato”.
Rodrigo Olvera, de la Familia Pasta de Conchos, señaló que el gremio del sector y su líder, Napoleón Gómez Urrutia, “fueron negligentes” ya que “tenían pleno conocimiento de las condiciones de inseguridad en la mina, y en lugar de seguir buscando la seguridad de los trabajadores, negociaron convenios favorables con Grupo México, y eso los hace corresponsables de la tragedia”.
Criticó que ahora estos actores ocupen o sean considerados para puestos políticos, pues Rubén Moreira recientemente fue nombrado dentro de la estructura de la dirigencia nacional del PRI, en tanto que el líder minero aparece en la lista de aspirantes a una legislatura federal por la vía plurinominal por Morena.
Los conferencistas lamentaron que pese a ser una región carbonífera y que este mineral sea letal con la salud de mineros y sus familias, en la zona no exista un hospital de especialidades respiratorias, e incluso no hay un solo neumólogo.
México es un caso sui géneris, dijo la activista Cristina Auerbach, coordinadora del informe, pues es el único país del mundo donde los mineros del carbón no se enferman de los pulmones o de las vías respiratorias.
“Deberían dar consejos a Alemania u otras naciones, cero casos reportan los empresarios, no hay enfermedades”, ironizó.
Demandaron justicia y verdad por los hechos, sanción a los responsables y reparación del daño.
Fuente: La Jornada