Una carta ciudadana denuncia malos manejos del secretario General del SUTERM
LA DESGRACIA DEL SUTERM, EL C. MIGUEL ANGEL MORA
Toda mi vida he creído que querer es poder, pero lamentablemente nos encontramos en una época en dónde por más que queramos hacer las cosas, aquí en México simplemente… ¡No se puede!
No se puede, no porque no queramos o seamos incapaces de realizarlas, sino porque lamentablemente el poder llega a manos de personas incorrectas, no aptas y muchas veces ni siquiera capacitadas para desempeñar un papel de jefe, ya que ese término les viene grande.
Estimado lector quisiera que mi voz se escuchara, por lo menos ante ustedes que al igual que yo, son ciudadanos normales, comunes, con trabajos, salarios establecidos, horarios y sobre todo con amplias responsabilidades como padres o peor aún madres de familia, así como yo, que he luchado incansablemente por sacar a mis dos hijos adelante, niños que demandan, dinero, atención, espacio, tiempo… ¡En fin! las personas que tienen hijos seguramente sabrán de lo que les hablo, soy una mujer que funge el papel de padre y madre y día con día así como ustedes yo, salgo diariamente a luchar para que mis hijos tengan un buen presente y con ello en el futuro sean mejores ciudadanos.
Soy Ingeniero Civil, guerrera por naturaleza y hoy en día se lo complicado que es cumplir las metas que uno se propone, pero aún lo más complicado es mantenerte en el mercado tan competido. Tengo una empresa de construcción y me he acercado a tocar las puertas de la CFE en donde amablemente me fueron abiertas, conseguí una obra de electrificación con un monto de 2.5 millones, la hice, la terminé en tiempo y forma, cumplí con mi parte del contrato en su totalidad.
Hoy queridos amigos quiero compartirles lo desilusionada que me siento ya que el Secretario General del SUTERM de la sección 33 de Xalapa el C. MIGUEL ANGEL MORA CRISÓSTOMO me solicitó de manera persistente, llamándome a mi teléfono celular una y otra vez, advirtiéndome que no nos habíamos reportado con él, con la cuota rigurosa, y que como autoridad máxima del SUTERM, él tenía la facultad de poder parar mi obra en el momento que él se dispusiera a hacerlo.
Así que investigué y legalmente lo que se debe pagar por el acuerdo que hay con el Comité Ejecutivo Nacional del SUTERM es del 2% de la cuota sindical más otro 2% del desplazamiento de obra, ello sin sumar los impuestos, esto es lo que legalmente se debe pagar. Sin embargo yo llevé mi cuota correspondiente de 20 mil pesos a este señor, quien me dijo que estaba incompleto y que de ninguna manera podía aceptar esas migajas, le pregunté cuanto más requería y me dijo que en total eran 250 mil pesos, pero que con 100 mil de inicio, ¡No pasaba nada! y que si no se los daba ese día por la tarde me clausuraría la obra. Eso quiere decir que sumados los impuestos él está cobrando el 10% en total.
Estimados amigos mi obra fue de 2.5 millones y me otorgaron 250 mil de anticipo de los cuales 100 mil cerrados fueron para este… Quien se dice ser una persona formal y capaz de asumir su cargo. Yo tuve la necesidad de endeudarme para que esa obra tuviera el avance que representa el anticipo. Que desilusión que a todos los que hemos tenido la oportunidad de servir y de participar en una empresa tan grande y de tal talle como lo es CFE tengamos que pasar por este tipo de personas que no saben manejar ni sus vidas y quieren llegar a manejar a todas las empresas que buscan subsistir en un mundo tan competido como el que vivimos hoy. ¿Y así quieren que hagamos las obras de calidad? Hagamos conciencia por eso hay tantos constructores quebrados por gente como usted señor.
Me despido esperando que puedan hacer algo, ya que este tipo de personas abusivas, considero que no pueden seguir guiando a nuestro país. Omitiré mi nombre por motivos de seguridad pero no saben que gusto me daría gritar a la luz, que soy yo quien se queja.
La inconforme.
Fuente: El Golfo
