sábado, 20 de septiembre de 2014

Cárteles mexicanos operan negocios de juguetes y ropa en EU para lavado: The Economist

Convertir el dinero sucio de la venta de drogas en moneda limpia se ha vuelto más difícil para las bandas de narcotraficantes mexicanos como resultado de las regulaciones bancarias en México y en los Estados Unidos, por ello los cárteles han optado por blanquear sus ganancias en el comercio fronterizo, publica The Economist en su edición de esta semana. 

El semanario inglés cita documentos de una corte de Los Angeles, los cuales revelan cómo varios negocios de prendas de vestir así como fabricantes de juguetes ayudaron a los narcotraficantes a transportar sus ingresos de ventas de regreso a México. “El esquema es relativamente simple. Un corredor de pesos en el mercado negro entra en contacto con importadores mexicanos que quieren comprar bienes para un negocio en Los Angeles. 

El corredor luego encuentra a una pandilla en los Estados Unidos que paga la factura del importador utilizando dólares de la venta de drogas. El importador paga el intermediario en pesos; el corredor se lleva su parte y da el resto a los narcotraficantes en México”, explica la publicación británica. Claude Arnold, quien está a cargo de la Oficina de Inmigración y la unidad de Investigaciones de Seguridad Nacional de Aduanas en Los Angeles, dijo al medio que las negociaciones han alcanzado niveles sin precedentes: “Nunca habíamos visto esto en una escala tan grande.” 

Arnold  explicó que en 2013 los bancos en los Estados Unidos presentaron 1.510 “informes de actividades sospechosas” relacionadas con el posible lavado de dinero basado en el comercio; más de la mitad provenía de California. The Economist detalla que este esquema de lavado no es algo nuevo, pero se ha vuelto común ante las dificultades de usar el sistema bancario para lavar el dinero. 

Recuerda que parte de estas dificultades tuvieron lugar luego de que el gobierno mexicano estableciera restricciones a los depósitos de dólares en 2010. Más tarde se impusieron requisitos sobre los pagos en efectivo por encima de un determinado umbral de artículos como casas, automóviles y demás informes. A su vez, dice, los Estados Unidos también ha aumentado su escrutinio de las transacciones en efectivo y adoptado una línea mucho más firme contra los bancos. 

En 2012 HSBC tuvo que pagar 1.9 mil millones a los reguladores en los Estados Unidos para resolver acusaciones de que, entre otras cosas, había fallado en supervisar operaciones con bandas de narcotraficantes mexicanos. 

“Esto ayuda a explicar por qué los capos de la droga centran ahora su atención en las empresas en Los Angeles, desde fabricantes de juguetes hasta mayoristas de ropa, como formas de enviar dinero a casa”. Algunas de estas empresas son legítimas, mientras que otras son usadas por su exportación frecuente de mercancías a México. 

“Mantenerse al día con los traficantes siempre será una tarea enorme. Las estimaciones varían ampliamente, pero el Departamento de Seguridad Nacional calcula que los traficantes envían hasta 29 millones de dólares a México cada año por los Estados Unidos. Si el lavado a escala industrial está ocurriendo, dicen algunos, los fabricantes más bien pequeños y los depósitos en efectivo no pueden ser el único conducto [...] Mejor hay qye buscar, también, a los flujos de capital en otros sectores-vivienda, turismo y similares”, dice la publicación.




Fuente: Sin Embargo| La Redacción