El Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) rechazó que un amparo otorgado el mes pasado a un grupo de jubilados y al ex tesorero Alejandro Muñoz signifique que retiren la toma de nota al secretario general de esa organización, Martín Esparza, pues sólo representa que se aceptó una queja en contra del sindicato.
A través de un comunicado, el SME resalta que el amparo otorgado por el Séptimo Tribunal Colegiado en Materia del Trabajo no es un hecho aislado, pues en días pasados, el poder judicial reactivo procesos judiciales en contra miembros de la dirección del sindicato y "no hay día en que no se nos tache en señalados medios de comunicación de constituir una amenaza para la sociedad.
"En el autoengaño gubernamental de que será posible dividirnos y aislarnos repiten en vano la estrategia mediática de desprestigio y criminalización de antaño, al mismo tiempo que vuelven a resucitar a sus títeres para torpedear la digna lucha de resistencia de los 16 mil 599 trabajadores que no hemos aceptado la liquidación".
Ayer, jubilados dieron a conocer que el séptimo tribunal colegiado en materia laboral otorgó un amparo al ex secretario del SME, Alejandro Muñoz y a 910 jubilados en contra de la asamblea del 12 de abril de 2011 para reformar "de manera ilegal" los estatutos para que se pudieran reelegir los 26 miembros del Comité Central de esa organización encabezados por Martín Esparza.
En respuesta, el SME sostuvo hoy: "Desmentimos está interpretación, lo cierto es que el Tribunal referido instruye a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) a que admita una retorcida queja en contra del SME. La JFCA que en primera instancia rechazo la queja de la autodenominada "disidencia" ahora la va estudiar, lo que de entrada no significa que los quejosos tengan la razón.
"Nuestro Comité Central goza de buena salud y conserva su toma de nota que es resultado de nuestra digna lucha de resistencia. A reserva de informar que nuestra organización interpondrá todos los recursos legales para su defensa, queremos hacer los siguientes comentarios al respecto".
En el comunicado del SME se subraya que al interior del sindicato no hay disidencia, sino que se trata de "un grupo de esquiroles que en la práctica ha roto con nuestro marco estatutario y tiene rato que se convirtió en un instrumento del gobierno para facilitar y promover su intervención en nuestros asuntos interno. Así lo hicieron cuando acudieron a la Secretaría del Trabajo de Javier Lozano y a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje a demandar la negativa de la toma de nota en contra de nuestro Comité Central legítimamente electo y la nulidad de nuestro proceso electoral democrático".
Fuente: El Universal