martes, 21 de junio de 2011

Rechazan proyecto hidroeléctrico 48 comunidades de Veracruz

JALAPA, Ver. (apro).- Habitantes de 48 comunidades de Coatepec se unieron contra la construcción de seis plantas hidroeléctricas sobre el río Los Pescados, que desemboca en La Antigua, “por los graves efectos ambientales que el proyecto causará a la región”.

Con el lema “Salvemos nuestro río, salvemos la cuenca del río La Antigua”, unos 600 habitantes de municipios de esa región manifestaron su rechazo a la construcción de las presas, proyecto impulsado por el gobierno del estado y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

En un mitin frente a palacio de gobierno, los inconformes denunciaron que ese
proyecto afectará a un millón 500 mil habitantes, quienes tienen sus viviendas en una extensa región que va desde Coatepec hasta La Antigua, por donde atraviesan varios ríos, entre ellos Los Pescados.

El integrante de este movimiento, Josafat Rodríguez, explicó que el gobierno del estado, con el apoyo de la CFE y de las autoridades municipales, prevé construir seis represas a lo largo del río La Antigua, que nace en la comunidad Barranca Grande, municipio de Teocelo, cerca del ejido Monte Blanco, y atraviesa Tlaltetela, Jalcomulco, Apazapan, Puente Nacional y Paso de Ovejas, entre otros municipios.
El proyecto, recordó, viene desde el gobierno de Fidel Herrera y ahora, con la administración de Javier Duarte se plantea llevarlo a término.

Los vecinos de la región de Coatepec, aclaró, no están en contra de la generación de energías, siempre y cuando éstas sean “limpias, amigas, como la eólica o solar, que pueden rendir más que una hidroeléctrica o nucleoeléctrica como Laguna Verde”.
Por ello, dijo, los habitantes de al menos 25 municipios se han unido para defender sus ríos y, a pesar de que han intentado dialogar con las autoridades estatales, éstas se han negado a recibirlos.

Pese a que las autoridades de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) han negado la existencia del proyecto, “la realidad es otra, pues incluso ya hay maquinaria trabajando en las comunidades”.

Fuente: Proceso