La protesta del Comité de la Campaña de Dignificación en la CNDH.
Foto: Sara Pantoja
En la sátira, mujeres de distintas organizaciones sociales sometieron a juicio político al ombudsman nacional por las graves omisiones y contradicciones en que ha incurrido durante su gestión.
“Raúl Plascencia no debe, bajo ninguna circunstancia, ser reelecto, es más, debería irse ya”, arguyeron.
Y lo declararon culpable.
El performance se realizó afuera de la sede nacional de la CNDH e incluyó la presencia de tres marionetas: La de una mujer llamada “Digna”, como parte acusadora; la de Plascencia Villanueva, como acusado –con un ángel y un diablo hablándole al oído–; y la “Matria”, el femenino de Patria, como juez vestida de blanco.
“¡Que paaaase el acusado!”, gritó la “Matria” en una expresión similar al de la conductora peruana Laura Bozzo. Y ahí comenzó el juicio: los mil 416 millones de pesos de presupuesto a la CNDH, los 400 mil pesos mensuales de sueldo del ombudsman, su designación “por el dedo del presidente”, el “estar más cerca del poder que de la ciudadanía” y hacer recomendaciones “a medias tintas, como siempre que se hace de la vista gorda”.
Al paso del transporte público, de autos particulares y de la gente de a pie, “Digna” recordó la recomendación por la muerte del niño José Alberto Tehuatlie en Puebla, los feminicidios en Ciudad Juárez, el juicio de inconstitucionalidad por la Interrupción Legal del Embarazo y las nulas acciones frente a las violaciones de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres.
A cada cuestionamiento, el ombudsman contestaba con evasivas, respuestas “acartonadas y vacías” y “el mismo discurso de siempre: la Comisión no tiene la facultad de intervenir… mi trabajo es independiente y autónomo… esto es una guerra sucia en mi contra para la reelección”. Y mientras, en voz baja, el diablo le hablaba al oído: “Ya nos cacharon que sólo presentamos los casos que nos dice el gobierno”.
Al final del alegato teatrero, vino la sentencia de la “Matria”: “Hoy aquí, frente a toda al concurrencia, es declarado culpable por no cumplir con el nombramiento y por no ser voz determinante en la defensa de los derechos humanos. Caso cerrado”. Entonces, de fondo, sonó la canción de Guadalupe D’Alessio: Culpable.
El pefil
Concluida la sátira política, Martha Juárez, una de las integrantes del Comité de la Campaña de Dignificación de la CNDH, leyó el comunicado que minutos después entregarían a Miriam Alvarado, directora de Atención al Público del organismo.
“El Senado de la República tiene la oportunidad de tomar una decisión que marque la diferencia en la conducción de la CNDH y que ésta recupere el sentido para lo que fue creada”, según el documento.
En él se definió el perfil que deberá tener quien suceda a Plascencia Villanueva en el cargo: “Debe ser la persona, mujer u hombre, que cuente con el mejor perfil para cumplir de manera eficaz y comprometida con las obligaciones constitucionales a favor de los derechos humanos.
“Quien ejerza la presidencia de la CNDH debe promover y defender, sin regateos ni dubitaciones, los derechos humanos de todas las personas, incluidos los de las mujeres mexicanas”, escritos en la Constitución Política y los tratados internacionales en la materia.
Según el comunicado, “ya es hora que la CNDH empiece a actuar a favor de los derechos de las mujeres. Pero eso sólo será posible sui existe una persona que cumpla cabalmente las funciones que la presidencia de este organismo obliga”.
En entrevista posterior, Martha Juárez aclaró que el Comité exige que el nuevo ombudsman sin vínculos con partidos políticos, “Plascencia es muy cercano a (Manlio Fabio) Beltrones”, actual coordinador del PRI en la Cámara de Diputados
Y acusó que el actual presidente de la CNDH se ha preocupado más por promocionarse en el extranjero y “porque las salas de justicia en los estados tengan su nombre, pero no se preocupa por la defensa de los derechos humanos, mucho menos los de las mujeres”.
El Comité de la Campaña de Dignificación de la CNDH está integrado por las organizaciones sociales Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos, Equidad de Género, Ciudadanía, Trabajo y Familia, Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad, Iniciativa Global para la Equidad, la Justicia y la Ecología y Cuéntame, entre otras.
Fuente: Proceso| SARA PANTOJA