La dirigencia nacional del PRI declaró “inexistente” la documentación sobre los “finiquitos” y “liquidaciones” de sus últimos cuatro ex dirigentes nacionales.
En la solicitud de información UE/14/01925, la Dirección General de Contabilidad y Tesorería del Comité Ejecutivo Nacional del PRI aseguró a la autoridad electoral “no contar” con estos documentos, referentes a Beatriz Elena Paredes Rangel, Humberto Moreira Valdés, Cristina Díaz Salazar y Pedro Joaquín Coldwell.
Sin embargo, el Comité Técnico de Información del Instituto Nacional Electoral (INE) reconvino al PRI por haber respondido fuera del plazo legal esta solicitud de información.
Incluso, en la resolución INE-CI/240/2014, el Instituto le advierte que en caso de que persista la reincidencia en dar respuesta de “manera notoriamente extemporánea” se notificará al secretario ejecutivo del Consejo General del INE para que inicie un “proceso sancionador”, como lo establece el artículo 71 del Reglamento de Transparencia y Acceso a la Información Pública.
Actualmente, Beatriz Paredes Rangel es embajadora de México en Brasil; Cristina Díaz, es senadora por Nuevo León; Pedro Joaquín Coldwell, es secretario de Economía, y Humberto Moreira, no tiene cargo alguno.
Hay que recordar que Moreira Valdés tuvo que renunciar a la dirigencia nacional del partido en medio de denuncias de que durante su gestión como gobernador del estado de Coahuila, firmó decretos por los que se adquiría una deuda de más de 33 mil cien millones de pesos, en la que se utilizó documentación apócrifa.
De los cuatro ex dirigentes que estuvieron al frente del PRI, y que no hay información en el partido de que cobraron su finiquito, tuvieron percepciones mensuales brutas de 75 mil 161 peso, y cuando menos 20 mil pesos más en gastos de representación.
Fuente: La Jornada| José Antonio Román
