domingo, 2 de diciembre de 2012

En México, las pensiones para ex presidentes mejor pagadas


El investigador de la UNAM, Ernesto Villanueva, realiza un análisis en su libro ‘Beneficios Expresidenciales’, editado por Temi, y que se presenta hoy en la Feria del Libro.


Guadalajara  • En México, un ex presidente recibe en promedio 5.8 millones de pesos mensuales, como parte de su pensión vitalicia por haber servido a su país, los cuales no son regulados, ni fiscalizados.

Así lo explica el investigador de la UNAM, Ernesto Villanueva, en el análisis que hace en su libro ‘Beneficios Expresidenciales’, editado por Temis, y que se presenta hoy en la Feria Internancional del Libro.

En entrevista, el Coordinador del área de Derecho de la Información del Instituto de Investigaciones Jurídicas platicó que el tema de las pensiones presidenciales es un tema que había pasado desapercibido, pero que guarda muchas incógnitas sobre la forma en que se les otorgan esos recursos.

Explicó que como parte de su investigación realizó una comparación con las pensiones que les otorgan a sus ex mandatarios en cinco países de los cinco continentes, para poder crear un paramento a nivel internacional.

“Tenemos pensiones para presidentes de escándalo, que incluyen ingresos globales de 5.8 millones de pesos mensuales; si hacemos cuentas, el Congreso destina el pago de 29 millones de pesos al mes para el pago de las pensiones”, dijo.

Villanueva comparó los ingresos de los ex presidentes con los que reciben sus homólogos: “México es el país que más paga a sus ex mandatarios, la diferencia con el más cercano es de 600 por ciento que es el de Singapur, 500 por ciento con el de Suiza, 350 por ciento con el de Reino Unido y 250 puntos porcentuales de diferencia con lo que recibe un ex presidente de Estados Unidos.

De acuerdo con su investigación, el ex presidente de Singapur tiene un ingreso mensual de un millón de pesos, “lo que evidencia la disparidad y desigualdad que hay”.

“Lo peor es que no se regulan los ingresos adicionales, además el acuerdo por el cual se otorga ese beneficio no tiene base jurídica, pues fue presentado en 1985 pero nunca fue publicado en el Diario Oficial de la Federación.

“Eso da la oportunidad para presentar recursos jurídicos, porque no cuenta con un fundamento legal. Se dan recursos estratosféricos sin ninguna base legal, lo que proponemos es de que se regule esas prestaciones y hacerlas más justas en el marco de la ley”, insistió.

El libro ‘Beneficios Expresidenciales’ se presenta hoy en la Feria Internacional del Libro a las 17 horas en el área dedicada a la transparencia gubernamental.




Fuente: Milenio