jueves, 15 de septiembre de 2011

Miles marchan en Acapulco contra la violencia y en apoyo a maestros

El gobernador confía en que el lunes reinicien clases en 320 planteles
Acapulco, Gro. Aproximadamente 4 mil personas, la mayoría docentes de la región educativa Acapulco-Coyuca de Benítez del nivel básico, participaron en la caminata convocada por integrantes del magisterio en la avenida Costera Miguel Alemán, para protestar por la inseguridad y exigir soluciones al problema de “violencia creciente” en el estado.

La movilización comenzó poco después de las 9:30 de la mañana junto a la glorieta de la Diana, arribó a la octava Región Naval y retornó al Centro Internacional de Convenciones, donde integrantes de los sindicatos Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (Suspeg), así como de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (Ceteg) bloquearon de manera intermitente ambos sentidos de la vía, al mediodía.

Dos horas más tarde marcharon a la coordinación regional, mientras una comisión de 12 profesores dialogaba con el secretario general de Gobierno, Humberto Salgado Gómez, en la Promotora Turística de la zona Diamante. “Salimos a la calle para que la sociedad se dé cuenta de que el maestro está luchando por paz y seguridad”, expresó Abel Casarrubias, secretario de una de las delegaciones del SNTE.

El gobernador Ángel Aguirre Rivero, quien visitó el Centro de Convenciones para recorrer los 70 módulos de productores de la feria del proveedor guerrerense, afirmó que los profesores regresarían el lunes a clases.
“Celebro que los maestros están tomando la decisión de incorporarse a las aulas; hemos dicho que compartimos esa preocupación y que vamos a estar más cerca de ellos. Tengo mucha confianza en que las reuniones que se han sostenido van por buen camino y el lunes regresen a clases”, expresó.

Asimismo, anunció un plan de reactivación económica para el turismo de Acapulco y la creación de un programa de empleo temporal para septiembre, octubre y noviembre.

“La verdad está muy cabrón; no todas las escuelas del centro cerraron, pero de aquel lado está muy difícil”, relató un joven docente, quien explicó que la mayoría de la base magisterial gana 3 mil 600 pesos a la quincena, y sólo los de más antigüedad perciben sueldos mayores. Enfatizó que el gobierno se olvidó muchos años de los jóvenes, pues de acuerdo con testimonios de víctimas, los infractores tienen entre 17 y 19 años, que en principio exigían 2 millones de pesos por liberar a docentes secuestrados, “pero luego le bajaron a 200 mil pesos. Muchos pagaron, pero se quedaron endeudados”.

Desde el pasado 25 de agosto, profesores de la zona periférica del puerto denunciaron amenazas, extorsiones, secuestros y robo de vehículos, y luego suspendieron labores de manera gradual en planteles, hasta cerrar más de 320.




Fuente: La Jornada