Mineros tratan de rescatar a sus compañeros en Pasta de Conchos. Foto: Eduardo Miranda
Según el peritaje denominado “Evaluación de las operaciones de recuperación en la mina de Pasta de Conchos y resultados de los futuros esfuerzos de recuperación”, elaborado por el experto D.G. Wooton, los mineros atrapados podrían estar infectados por alguna enfermedad potencialmente mortal.
“El nivel de agua cubre el área donde las víctimas estaban trabajando, resultando que el agua ha estado en contacto con los cuerpos en descomposición”, señala el documento, cuya información fue difundida por el diario ‘Vanguardia’.
No obstante, dependiendo de la salud de las víctimas, agrega, los trabajadores de rescate pueden estar expuestos a infecciones crónicas, incluyendo hepatitis, VIH, patógenos entéricos y tuberculosis.
“Esta exposición puede suponer severos riesgos a la salud al personal de la mina, a sus familias o a la comunidad entera”, puntualiza la investigación realizada del 23 al 27 de marzo de 2007.
Al respecto, la directora de la organización Familia Pasta de Conchos, Cristina Auerbach Benavides, señaló que en todas las minas hay sobrevivientes y “las explosiones de gas no rondan por la mina buscando mineros. Tienen su propia trayectoria y su propia lógica de acuerdo a la física, no a la voluntad de Grupo México”.
Entonces, dijo, sí hubo sobrevivientes, “ellos los dejaron ahí y esa es su responsabilidad, esa es la razón por la que no quieren hacer el rescate”.
De acuerdo con la nota publicada, el análisis –entregado a las familias de los 63 mineros atrapados– se realizó con base en entrevistas a funcionarios de Grupo México y expertos en seguridad laboral, e indica que se analizaron muestras de agua tomadas de un agujero de bombeo donde se encontraron altos niveles de bacterias coniformes y aeróbicas, comúnmente encontradas en cadáveres en descomposición.
Esta teoría es reforzada por un segundo informe —también ordenado por Grupo México y elaborado por Donald McBride, supervisor inspector para la Oficina de Minas y Minerales de Illinois— que indica que la mina “podría contener agua contaminada de enfermedades posiblemente mortales”.
McBride advierte que arriesgarse a recuperar los cuerpos podría ser un peligro para la salud.
“Los cuerpos de los 63 mineros perdidos se han descompuesto en estas áreas por más de 13 meses. Creo que muchos de ellos están en o debajo de esta agua. Temo que las bacterias y los niveles de contaminación en esta agua, que ahora está totalmente saturada en los suelos de la mina, los escombros, materiales y todo lo que los trabajadores de recuperación encontrarán, estará contaminando con algunas terribles enfermedades posiblemente mortales”, cita el documento.
La nota precisa que esos resultados fueron entregados a Francisco Javier Salazar, titular de la Secretaría del Trabajo en el gobierno de Vicente Fox.
Reciben a golpes a tres obreros reinstalados en mina propiedad de Bailleres
Luego de una lucha legal de ocho años por despido injustificado, tres afiliados al Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Similares de la República Mexicana (SNTMMSSRP) fueron reinstalados el lunes pasado en su lugar de trabajo en la minera Fresnillo PLC.
Sin embargo, Javier Canales, Ramón Juárez y Noel Méndez quienes le ganaron el juicio laboral a la minera fueron recibidos con golpes, insultos y hasta amenazas por un centenar de empleados, según denunció Óscar Alzaga, abogado del sindicato.
Por esa razón los tres afectados presentaron denuncias penales contra la empresa por lesiones.
La minera Fresnillo PLC, se encuentra en la ciudad del mismo nombre, a unos 65 kilómetros al norte de la capital de Zacatecas, es la principal productora de plata primaria del mundo y propiedad del magnate Alberto Bailleres González, quien en noviembre pasado recibió del Senado de la República la medalla Belisario Domínguez.
Según Alzaga, el comportamiento de Fresnillo PLC es completamente “gansteril”, ya que dentro de sus instalaciones y con su personal persigue, amedrenta y golpea a trabajadores sindicalizados que se oponen al desmantelamiento del contrato colectivo de trabajo.
Los directivos de la empresa, denunció, recurren a Carlos Pavón Campos, líder del Sindicato Napoleón Gómez Sada, quien a su vez contrata golpeadores encabezados por David Navarro y Gustavo Barrios para amedrentar a los agremiados del SNTMMSSRP.
Noel Méndez, uno de los tres reinstalados y agredidos, afirmó que el 10 de junio Navarro y Barrios encabezaron una agresión contra miembros del sindicato a las puertas de Fresnillo PLC, donde murió a batazos y pedradas el minero Juventino Flores Salas y 20 más resultaron lesionados.
“A Alberto Bailleres le estorban los trabajadores libres del sindicato minero; por eso los ataca con La Marrana Carlos Pavón y sus gánsteres, porque en Fresnillo PLC quiere imponer contratos de protección que desmantelan los derechos de los mineros, como ya lo hizo en la mina La Herradura, en Sonora, también operada por Fresnillo PLC”, denunció Méndez.
El abogado contó que el lunes pasado cuando los mineros llegaron a trabajar, los esperaban unos 60 golpeadores comandados por David Navarro y Gustavo Barrios y cuando trataron de llegar a la oficina de acceso de personal, donde deben registrar su ingreso, fueron golpeados nuevamente por lo que tuvieron que salir huyendo.
Fuente: Proceso| La Redacción