martes, 17 de enero de 2012

Desata dedazo crisis en el PRI

Los problemas internos que enfrenta el tricolor se han extendido, por lo menos, a unas 16 entidades federativas

La selección de candidatos en el PRI mediante dedazo provocó una crisis de inconformidades que derivó ya en una primera fractura interna.

Luego de varios meses de protestas, la senadora María Elena Orantes renunció ayer a su militancia en el tricolor tras acusar a la dirigencia nacional de su hasta ayer partido y a su aspirante presidencial, Enrique Peña Nieto, de respaldar la eventual candidatura del senador del PVEM Manuel Velasco al Gobierno del Estado de Chiapas.

La legisladora, ahora independiente, también condenó que la coalición federal negociada por el Comité Ejecutivo Nacional tricolor entregara espacios a otros partidos que carecen de fuerza política.

"Sin respeto alguno, las cúpulas del mismo PRI comprometieron su destino y lo condenaron, nuevamente, a participar en el proceso de 2012 sin tomar en consideración a sus militantes al obsequiar candidaturas a partidos políticos que son minoría y que, electoralmente, no representan nada y a quienes, innecesariamente, se les cedió un importante número de senadurías y diputaciones, entre ellas las de mi Estado, Chiapas", acusó.

De manera paralela, la dirigencia nacional del PRI desató inconformidades en estados como Tabasco y Morelos, donde la definición del candidato a Gobernador se encuentra atorada como consecuencia de la confrontación interna.

En el primer caso, algunos de los aspirantes han protestado públicamente, y por lo menos uno, el ex Alcalde de Villahermosa Evaristo Hernández, ya amenazó con renunciar al partido.

Desde diciembre del año pasado, el CEN informó a priistas de diversos estados que la definición de las candidaturas quedaría en manos de la cúpula y se basaría en el posicionamiento que arrojaran diversas encuestas.

En el caso de Jalisco, la dirigencia consiguió su objetivo y dejó marginados a algunos cuadros que fueron compensados con su incorporación al equipo de campaña de Peña Nieto.

Los problemas internos que enfrenta el PRI se han extendido a, por lo menos, unas 16 entidades federativas en las que también se han presentado inconformidades, ya sea por la imposición de los Gobernadores o por la entrega de candidaturas al PVEM y al Partido Nueva Alianza, fundado por Elba Esther Gordillo.

Además de en el Distrito Federal, el tricolor enfrenta problemas en Morelos, Guanajuato, Durango, Baja California, Oaxaca, Sinaloa, Quintana Roo, Veracruz y Zacatecas.




Fuente: Reforma