viernes, 13 de mayo de 2011

La capacidad adquisitiva de los sueldos es hoy menor a la de 2008


En el sector manufacturero y en el comercio se gana 6.76% y 10.75% menos, dice el BdeM

Tres de cada cuatro mexicanos trabajan por $179 diarios

De la población ocupada, sólo 26% recibe más de tres salarios mínimos; 22.7%, capta entre uno y dos, y 21.4 percibe de dos a tres

La recuperación de la actividad económica después de la crisis de 2008 y 2009 no ha llegado a los bolsillos de los trabajadores. El promedio de las remuneraciones, tanto en la industria como en el comercio, es ahora menor al registrado a mediados de 2008, indicó información del Banco de México (BdeM). La contención de los salarios, uno de los factores que han apoyado el control de la inflación, ha ocurrido mientras la actividad de las empresas, tanto las exportadoras como las orientadas al mercado interno, han retomado el dinamismo perdido por la crisis.

El ingreso promedio de los trabajadores mexicanos en el sector manufacturero es ahora 6.76 por ciento menor en términos reales, es decir, descontado el efecto de la inflación, al que prevaleció en junio de 2008, periodo en que la economía mexicana comenzó a acusar los efectos de la crisis financiera y después también económica en Estados Unidos.

Información del banco central mostró un deterioro todavía mayor en las actividades comerciales, que emplean a una parte mayoritaria de los trabajadores del sector formal.

La remuneración promedio en el comercio es ahora 10.75 por ciento menor, también en términos reales, a la de junio de 2008, según datos del banco central.

En el país, tres de cada cuatro trabajadores laboran a cambio de un ingreso que no supera los tres salarios mínimos, 179 pesos diarios para la zona que comprende la ciudad de México, reveló la información del banco.

Según un listado de precios de la Procuraduría Federal del Consumidor, adquirir en la ciudad de México un litro de aceite, un kilogramo de azúcar, un kilogramo de espinazo de cerdo, un kilogramo de jitomate, medio kilogramo de chile de árbol, un kilogramo de cebolla, otro de huevo y uno de tortilla de maíz requiere desembolsar 150 pesos, esto es, 83 por ciento del equivalente a tres salarios mínimos.

Los datos del Banco de México indican que de la población ocupada en el país, sólo 26 de cada 100 perciben más de tres salarios mínimos; 22.7 de cada cien trabajan a cambio de un sueldo de entre uno y dos minisalarios; 21.4 devengan de dos a tres salarios mínimos; 12.4 de cada 100 ganan solamente un salario mínimo, y el resto, 8.4 de cada cien, obtienen menos de un salario mínimo, lo que implica que viven básicamente de propinas.

En la zona geográfica en que está incluida la ciudad de México, un salario mínimo es de 59.82 pesos diarios.

Crece la actividad económica

El miércoles pasado, Agustín Carstens Carstens, gobernador del Banco de México, aseguró que 2010 fue "bastante bueno" para la economía mexicana, y que esa tendencia general de crecimiento con inflación controlada se ha sostenido en lo que va de 2011. Calificó de "vigoroso" el desempeño de la actividad productiva.

En el primer trimestre de este año, según la Secretaría de Hacienda, el producto interno bruto (PIB), la medida más amplia sobre el desempeño de la actividad económica, creció 5 por ciento a tasa anual. El Banco de México revisó al alza el pronóstico sobre el aumento del PIB este año, que ubicó en entre 4 y 5 por ciento, dos décimas de punto más que lo previsto hace tres meses.

Un informe publicado el miércoles por el banco central apuntó que la productividad de las empresas ha crecido más que los costos que representa para los empresarios el pago de los salarios, que no han logrado remontar el nivel de compra que tenían antes de la crisis de 2008/2009.

Dice el Informe sobre la inflación; enero-marzo 2011, publicado por el Banco de México el miércoles: "Las condiciones en el mercado laboral han contribuido a moderar los aumentos salariales. Por un lado, el nivel del ingreso promedio de los empleos que se han generado durante la recuperación de la economía es inferior al de los puestos de trabajo que se perdieron durante la fase recesiva. Por otro, ejercicios econométricos sugieren que los incrementos salariales que se han venido observando han sido inferiores a los que históricamente se han presentado en fases del ciclo similares".

Añade: "El hecho de que los niveles de utilización de la capacidad productiva instalada se ubiquen por debajo de los registrados previo a la crisis, ha permitido que la reactivación de los niveles de producción sea superior a la del empleo. Así, se ha observado un importante incremento en el nivel de la productividad media de la mano de obra. Ello, en combinación con la evolución de las remuneraciones, se ha traducido en una caída de los costos unitarios de la mano de obra y en un aumento de la competitividad de las empresas. Lo anterior ha incidido favorablemente en el comportamiento de los precios, a la vez que ha contribuido a una mayor creación de empleos".



http://www.jornada.unam.mx/2011/05/13/index.php?section=economia&article=026n1eco