Carlos Romero Deschamps, líder del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) y actual senador por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), es el legislador que promedia más faltas e improductividad en la historia del Congreso de la Unión, desde que en 1979 se convirtió, por la vía plurinominal, en diputado federal por el tricolor en la LI Legislatura.
El trabajo legislativo de Romero Deschamps suma 34 años. Siempre por selección interna de su partido y nunca a partir de la elección directa de los ciudadanos.
Fue diputado federal en la LV Legislatura, de 1991 a 1994; senador en la LVI y LVII Legislaturas, entre 1994 y 2000, y desde el pasado 1 de septiembre de 2012, en la actual LXII Legislatura, ocupa una curul en el Senado de la República de nuevo en representación del PRI.
Líder del STPRM desde hace 20 años –cargo en el que, tras su reelección, seguirá hasta 2018– y militante priista desde 1961, Carlos Romero no ha presentado una sola iniciativa propia en toda su carrera como legislador y sólo ha firmado iniciativas como adherente, revelan datos de la consultora Integralia, que dirige el ex presidente del Instituto Federal Electoral (IFE), Luis Carlos Ugalde Ramírez.
Una investigación de Integralia sobre la productividad del Congreso mexicano reveló quienes son los 10 senadores con menor presencia en las sesiones de la LXII Legislatura, en el primer periodo de sesiones, de septiembre a diciembre de 2012.
En esa lista, por supuesto, aparece Carlos Romero Deschamps, pero también Joel Ayala (PRI), Mónica Arriola (Nueva Alianza), Martha Elena García (PAN), Luz María Beristain (PRD), Ismael Hernández Deras (PRI), Gabriela Cuevas (PAN), Juana Leticia Herrera Ale (PRI), Sofío Ramírez (PRD) y Ninfa Salinas (PVEM).
En abril pasado, cuando se reveló este primer informe, Romero Deschamps, negó ser un senador faltista. Al ser consultado por la prensa sobre sus ausencias en el trabajo legislativo dijo aceleradamente: “Están falseando (la información) y eso a nadie le va a parecer. Yo siempre hago patente mi presencia, véame aquí estoy”.
Integralia tampoco registró en el estudio de la actividad de Carlos Romero en el Senado que haya participado en puntos de acuerdo, presentaciones en tribuna, intervenciones en el pleno ni en comisiones.
La consultora lo ubica, además, como uno de los seis legisladores con menos votaciones en reformas. El trabajo más reciente en el que participó el líder petrolero data de marzo pasado, cuando se unió a los firmantes de la iniciativa del senador priista Jesús Casillas Romero, para garantizar baños limpios y gratuitos en las gasolineras del país.
Para ello, Casillas propuso al pleno reformar la Ley Reglamentaria del artículo 27 Constitucional en el ramo del petróleo y la Ley Federal del Consumidor.
Así, más allá de las demandas judiciales en su contra, que se mantienen activas en la Procuraduría General de la República (PGR) y en las que se le imputan cargos de corrupción en el manejo del sindicato petrolero, Carlos Romero Deschamps tiene ya 34 años de labor legislativa sin elaborar una sola iniciativa a cuenta personal.
Otras iniciativas que ha firmado
El senador priista también ha signado otras iniciativas, realizadas por otros de sus colegas en la presente Legislatura. La primera fue presentada al pleno en la sesión del jueves 13 septiembre 2012.
Fue firmada por las bancadas del PRI y del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y se trató de la iniciativa de reforma a diversos artículos constitucionales para fortalecer al Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (Ifai); es decir, para reforzar la transparencia en el ejercicio de las funciones pública, un punto que se le reclama al propio Romero Deschamps por su opacidad.
La segunda iniciativa en la que aparece el nombre de Romero Deschamps fue presentada el jueves 15 de noviembre de 2012, y también fue suscrita por senadores del PRI y PVEM. En ésta se propuso crear la Comisión Nacional Anticorrupción.
A nombre de la bancada priista, la Senadora Ivonne Álvarez presentó una iniciativa de reforma al Reglamento del Senado de la República para regular las iniciativas preferentes que envía el Ejecutivo federal, un asunto que causó polémica en septiembre de 2012, por no tenerse reglas claras sobre el tema.
El 12 de febrero, el líder de los senadores priistas, Emilio Gamboa Patrón, junto con el legislador José Francisco Yunes Zorrilla, presentaron una iniciativa para reformar el Artículo 73 constitucional en materia de deuda de estados y municipios. Ahí también apareció el nombre del líder petrolero.
Luego, el martes 19 de febrero, cuando legisladores del PRI, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), PVEM y Partido del Trabajo (PT) suscribieron la iniciativa de reforma a la Ley General de Víctimas, el documento apareció firmado por Romero Deschamps.
El 11 de abril de 2013 se planteó reformar la Ley que crea el Fideicomiso que Administra el Fondo para el Fortalecimiento de Sociedades y Cooperativas de Ahorro y Préstamo y de Apoyo a sus Ahorradores. Todas esas propuestas fueron suscritas por Carlos Romero Deschamps, sin que participara en su creación, apegándose al derecho de sumarse a una propuesta redactada por otro legislador.
No propone, pero cobra
Por ser senador de la República, Romero Deschamps recibe una dieta mensual de 121 mil 600 pesos, tiene un seguro de vida institucional de 40 meses de sueldo integrado (4 millones 864 mil pesos), así como con un seguro de gastos médicos mayores por mil 500 salarios mínimos (97 mil 140 pesos).
En un año y un mes de esta legislatura, el líder sindical ha sido el más mencionado en la prensa por señalamientos de presunto enriquecimiento ilícito, por los escándalos de gasto excesivo de sus hijos y hasta por la afición a las apuestas de caballos de su chofer, Arturo Trejo González, que por su trabajo como senador.
También se ha distinguido por promover cuatro amparos contra resoluciones del Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (IFAI), para no revelar los datos que se le solicitan en relación a contratos con Petróleos Mexicanos (Pemex) y transferencias de recursos públicos, lo que lo convierte en el líder gremial con mayor opacidad en el país.
Si se midiera la productividad de un legislador por el número de iniciativas, puntos de acuerdo, presentaciones en tribuna, asistencias al pleno y a comisiones, el senador, sin duda, saldría muy mal parado.
Fuente: Sin Embargo | La Redacción