martes, 1 de mayo de 2012

La debilidad de las centrales obreras

Las otrora poderosas, organizaciones sindicales como la CTM y la CROC enfrentan una considerable reducción de su membresía, dicen expertos.

Las organizaciones sindicales llegan este 1 de mayo golpeadas, con división interna y en algunos casos con una significativa reducción de su membresía y en su otrora poder político. Especialistas como los investigadores Javier Aguilar y Alfonso Bouzas, de la UNAM, y Carlos Rodríguez, coordinador ejecutivo del Centro de Reflexión y Acción Laboral (Cereal), así como los dirigentes de los sindicatos de Telefonistas, Francisco Hernández Juárez, y de los pilotos, Fernando Perfecto, coinciden en que la libertad sindical enfrenta el día de hoy un saldo negativo.

“El primer punto de debilitamiento de los sindicatos es la pérdida de membresía. Los únicos que han crecido en este sexenio son los contratos de protección”, subraya Carlos Rodríguez.

Recordó que hace unos meses el Comité de Libertad Sindical de la OIT invitó al gobierno de México a que tome medidas para iniciar un diálogo constructivo con las organizaciones de trabajadores sobre la aplicación de la legislación laboral y sindical, a fin de examinar las cuestiones relacionadas con los contratos de protección, diálogo que debe incluir las cuestiones relativas a las cláusulas de seguridad sindical de exclusión, y la presunta falta de imparcialidad de las juntas de Conciliación y Arbitraje, entre algunas otras.

Alfonso Bouzas cita como ejemplo de esto último la Junta del Distrito Federal y el “escandaloso crecimiento” de los contratos de protección, lo cual ha impedido a los trabajadores organizarse en sindicatos, con lo que es evidente la pérdida de derechos como la propia seguridad social.

Paralelamente, las centrales no han sabido defender a sus agremiados y cada vez tienen menos. Un ejemplo de ello, dice Javier Aguilar, es la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) y la Confederación de Trabajadores de México (CTM), que, aunque siguen siendo corporativas y ligadas al PRI, tienen ahora menos afiliados.

En cinco años, unos 400 mil han dejado esas organizaciones, según Aguilar. Carlos Rodríguez, del Cereal, estima la merma en unos cinco millones a nivel nacional y de varias agrupaciones.

A la vez, son menos los espacios políticos que tienen, pues hace dos décadas la CTM tenía hasta 50 legisladores en la Cámara de Diputados y el Senado de la República y en la presente legislatura inició con cinco diputados y dos senadores.

El sector obrero en general tiene en el Congreso sólo a 26 representantes, incluidos entre otros el dirigente de los telefonistas, Francisco Hernández Juárez, por el PRD, y Valdemar Gutiérrez, por el PAN, del Sindicato del Instituto Mexicano del Seguro Social, que no logró posicionarse en una candidatura para el Senado.

El sector campesino supera en mucho al obrero, pues tan sólo la Confederación Nacional Campesina (CNC) tiene 84 diputados federales.

“El Congreso del Trabajo, al igual que la CTM, se encuentra en franco deterioro sindical y político. Se ha convertido en un aparato o mecanismo que se encuentra al servicio, no de los trabajadores, sino más bien del gobierno y de la clase patronal. Por estas mínimas razones puede afirmarse que el CT no es un representante genuino y legítimo de los trabajadores mexicanos”, dice Aguilar.

La CTM rechaza lo anterior y sostiene que está fortalecida y que ha sido factor importante para la paz laboral en México, paralelamente a las conquistas que ha tenido a través de la historia, como la creación del Infonavit y el Fonacot y el fortalecimiento de las prestaciones en materia de seguridad social a través del IMSS. Coincide con los especialistas en que se vive una política antisindical.

Patricio Flores, vocero de la Confederación que encabeza Joaquín Gamboa, sostiene que los trabajadores de México no tendrán nada qué festejar el próximo 1 de mayo, pues ante la política de agresiones hacia los sindicatos y las condiciones adversas que se les han presentado durante casi 12 años de gobiernos panistas los afiliados al Congreso del Trabajo harán una jornada de demandas y protestas.

Francisco Hernández Juárez y Fernando Perfecto resaltan que también estarán en el Zócalo de la ciudad de México, poco después de las organizaciones del CT, para expresar su inconformidad por la política laboral y económica del gobierno.