En el sector rural se han perdido 2 millones de empleos y ha crecido la pobreza, aseveran
En relación con el sector rural, los cinco años de gobierno de Felipe Calderón han dejado la pérdida de 2 millones de empleos, aumento de 50 por ciento en las importaciones de comida, 10 millones más de mexicanos en pobreza, incremento de la migración, déficit por 22 mil millones de dólares de la balanza agropecuaria e inflación de 70 por ciento en los alimentos.
“No hay nada positivo”, sostuvieron líderes de la Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos (CIOAC), la Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras de Productores del Campo (ANEC), la Central Campesina Cardenista (CCC), la Unión Nacional de Organizaciones Regionales Campesinas Autónomas (Unorca), la Central de Organizaciones Campesinas y Populares (Cocyp) y la Confederación Nacional Campesina (CNC).
En entrevistas telefónicas por separado, los dirigentes de las organizaciones sostuvieron que no se ha remontado la pérdida de empleos; “es ilusorio pensar que habrá un incremento de la demanda interna; la verdad es que la población no tendrá condiciones mejores”, apuntó Federico Ovalle Vaquera, de la CIOAC.
El aumento de la importación de los alimentos tiene un efecto directo en la pobreza, pues en la medida en que no haya políticas para la producción, las familias que viven en el campo no tienen acceso a ingresos ni pueden incrementar los cultivos por la falta de subsidios.
La crisis agroalimentaria se profundizó por la terquedad del gobierno con un modelo que se sustenta en apuntalar exportaciones de algunas frutas y hortalizas y abandonar la producción de granos y otros alimentos, afirmó Víctor Suárez, de la ANEC. Basta con recorrer las zonas rurales para ver cómo se ha incrementado la pobreza y desnutrición, añadió.
José Jacobo Femat, de la Cocyp, prevé que por la reducción de envíos de dinero desde el extranjero habrá una contracción en las zonas de temporal y de riego de los pequeños productores, ya que 18 millones de campesinos dependen de esos recursos para sembrar. A eso se suma la inseguridad que también ha golpeado a los campesinos.
Éste será conocido como el “sexenio negro” no sólo por la muerte de alrededor de 50 mil personas, sino porque no se ha rectificado el camino en materias económica, laboral, política y de garantías a los derechos de los civiles, entre otros rubros, señaló.
“No hemos visto nada que permita expresarnos de manera positiva de este gobierno; en cinco años lo que se tuvo fue una mayor concentración de los recursos en las grandes empresas nacionales y extranjeras”, mencionó Olegario Carrillo Meza, dirigente de Unorca.
De 5 millones de unidades de producción sólo 3 mil participan en el comercio internacional; el gobierno gasta más de 5 mil millones de pesos anuales en la promoción de exportaciones, recursos superiores a los que se destinan a programas dirigidos a los pequeños campesinos, señaló.
Desde hace tres años, Calderón repite que el país está en recuperación, aún con la crisis alimentaria y financiera mundial, apuntó la CCC. La CNC sostuvo que los programas sociales tienen pocos resultados porque “se han burocratizado”.
Fuente: La Jornada