Los diputados y senadores regresan a sesiones con la misma agenda pendiente de hace cuatro meses.
Satisfagan o no a la sociedad, los 628 legisladores que conforman el Congreso de la Unión cobran puntualmente más de 200 mil pesos mensuales en dietas, prestaciones y beneficios que, en muchos casos, se otorgan de manera discrecional. En total, la erogación mensual para cubrir los ingresos de los "representantes populares" supera los 125 millones 600 mil pesos.
Además, el costo mensual por legislador puede elevarse cuando estos cumplen funciones como presidir comisiones o integrar las mesas directivas de las Cámaras.
El Presupuesto de Egresos de la Federación indica que para 2011 la bolsa aprobada para la Cámara de Diputados es de más de 5 mil 444 millones de pesos, de los cuales 2 mil 885 millones (53 por ciento) fueron etiquetados para cubrir el capítulo "Servicios Personales", es decir, sueldos y salarios de la burocracia de San Lázaro.
Para el Senado de la República, el presupuesto anual es de 3 mil 385 millones de pesos; de los que mil 494 millones (44 por ciento) para cubrir los costos burocráticos.
Diputados
Los ingresos mínimos de los diputados federales son de 197 mil pesos mensuales, cantidad que se incrementa dependiendo de los cargos que ocupen dentro de la estructura de la Cámara (más de 848 mil pesos mensuales en el caso de quien preside la Mesa Directiva).
El manual que regula las remuneraciones de los legisladores reporta que cada uno de ellos recibe una dieta mensual de 75 mil 631 pesos, vales de despensa por 2 mil 780 pesos, ayuda para asistencia legislativa por 45 mil 786 pesos, ayuda para atención ciudadana por 28 mil 772 pesos y una aportación de hasta el 12 por ciento de la dieta que la Cámara de Diputados deposita a un fondo de ahorro.
Otros beneficios de los diputados son boletos de avión (viaje redondo) para ir a sus estados al menos cuatro veces al mes, apoyo para transporte a quienes viven a menos de 300 kilómetros de San Lázaro, una tarjeta IAVE sin límite de uso en las carreteras de cuota, teléfono celular, vales de alimentos para usarlos en los restaurantes de San Lázaro los días de sesión.
Otras prestaciones, que no se encuentran contempladas en las percepciones mensuales, son un "apoyo destinado a la presentación del informe de actividades", seguro de vida institucional, gastos funerarios (equivalentes) y un seguro médico extensivo al cónyuge, padres e hijos menores de 25 años de edad, con cobertura en el extranjero.
A ello se suma el personal de apoyo: todos los diputados pueden contratar una secretaria, cuyo sueldo varía de 4 mil 700 a 11 mil 600 pesos mensuales, y cuentan con una aportación de 10 mil pesos para contratar más personal "de apoyo".
Estas prestaciones se incrementan para los presidentes o secretarios de las 44 comisiones, los siete secretarios de la Mesa Directiva, los tres vicepresidentes y el presidente, que es el funcionario de la Cámara con más prerrogativas.
En la Legislatura pasada, según la información más reciente que difunde la Cámara, el número de funcionarios adscritos a la Presidencia de la Mesa Directiva era de 19 y su costo al erario superaba los 674 mil pesos mensuales.
Senadores
Para los senadores, los beneficios no son menores: cada uno de ellos tiene ingresos mensuales de al menos 227 mil pesos: una dieta mensual de 127 mil pesos, una ayuda para contratación de asistentes en materia jurídico-administrativa de 50 mil pesos y un apoyo "inherente al cargo" de 30 mil pesos que puede utilizarse para sufragar los costos de sus oficinas de atención ciudadana.
Más aún, la Cámara alta deposita el equivalente al 10 por ciento de la dieta a un fondo de ahorro que se entrega a fin de año a los 128 senadores.
Los senadores reciben también boletos de avión (uno por semana durante el periodo de sesiones), ayuda para transporte terrestre, seguro de vida institucional, aguinaldo y un seguro de gastos médicos mayores que, al igual que en el caso de los diputados, puede extenderse al cónyuge, padres e hijos menores de 25 años.
El costo de cada senador puede incrementarse a partir de las responsabilidades que tienen asignadas. Por ejemplo, los presidentes de las comisiones legislativas reciben un presupuesto de 90 mil pesos para cubrir los honorarios de asesores y 10 mil pesos por concepto de "asignaciones a comisiones legislativas", los cuales pueden utilizarse para el pago de gastos de consultoría, estudios jurídicos, gastos de comunicación interna y materiales y suministros.
Opacidad
Las percepciones no sólo son altas, también muestran un alto grado de opacidad: los legisladores no están obligados a comprobar la manera en la que ejercen la bolsa que se les entrega para la atención de los ciudadanos que representan, el Congreso no los monitorea y, aun cuando algunos montos son otorgados para la contratación de personal de apoyo, nada los obliga a demostrar que fueron utilizados para dicho fin.
"El apoyo económico por Atención Ciudadana (más de 28 mil pesos) se da por comprobado con la firma del diputado en el recibo o, en su caso, con el comprobante del depósito bancario, razón por la cual no se cuenta con el desglose de gastos", reconoce la Cámara de Diputados en su página de Transparencia.
Otro rubro en el que existe gran opacidad es el presupuesto destinado a la contratación de personal. Cada mes, los legisladores reciben más de 45 mil pesos por concepto de Apoyo Parlamentario; sin embargo, estos recursos son utilizados a discreción, pues nada los obliga a comprobar cómo fueron utilizados.
La opacidad es mayor en la cámara de senadores. El manual de percepciones de la Cámara alta no contiene información sobre las prestaciones "inherentes al puesto".
El documento indica a cuanto asciende la dieta de cada legislador, los seguros de gastos médicos, de separación individualizado y de vida, así como el aguinaldo; sin embargo, no contiene información sobre los apoyos para traslado, asistencia legislativa y atención ciudadana a pesar de que los señala como parte de sus prestaciones.
El Reglamento del Senado de la República da pie a la discrecionalidad: "conforme a la disponibilidad presupuestal y a los acuerdos de los órganos competentes, todos los senadores pueden recibir recursos adicionales para servicios de asesoría, gestoría y otros inherentes a sus funciones".
Grupos parlamentarios
Además de las erogaciones en sueldos y prestaciones de los legisladores, existen presupuestos asignados a los grupos parlamentarios que son manejados de forma discrecional por sus coordinadores.
En la Cámara de Diputados, en 2010, el monto aprobado para la partida 3827 ("asignaciones a grupos parlamentarios... para apoyar el desarrollo de sus funciones legislativas, actividades complementarias y de gestoría") fue superior a mil 125 millones de pesos.
De ese dinero, hasta abril de 2010 el grupo parlamentario del PRI reportó haber ejercido 53.4 millones de pesos; el PAN, 33.9 millones; el PRD, 16.9 millones; el PVEM, 6.4 millones; el PT, 4.6 millones; Nueva Alianza, 3.8 millones, y Convergencia, 3.4 millones de pesos.
No existe información actualizada disponible, y mucho menos reportes específicos sobre el destino de ese dinero.
En el caso del Senado, la partida para asignaciones a grupos parlamentarios es de 34.7 millones de pesos mensuales (416.8 millones en todo el año), pero la información disponible no especifica montos por partido.
El ejercicio de esas partidas es tan discrecional que los propios legisladores han tratado de regularlo.
En noviembre del año pasado, la presidenta de la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación, la perredista Esthela Damián, presentó una iniciativa de reforma a la Ley Orgánica del Congreso para obligar a las bancadas a informar trimestralmente a la Junta de Coordinación Política la manera en la que ejercen los recursos que les asignan.
A pesar de que era un primer paso a la transparencia, la iniciativa se encuentra en la congeladora.
Fuente: Tabasco HOY