Los gasolinazos no se justifican, sino que obedecen a una política de venta barata de crudo e importación de refinados caros, señaló un documento.
Tanto la dirigencia nacional como diputados federal del PRI reaccionaron en contra de lo señalado la víspera por la OCDE relativo a cortar subsidio a gasolinas e insistieron en la urgencia de que se congelen los precios de la gasolina y el disel para disminuir la crisis económica que trae consigo el excesivo costo del transporte en prácticamente todos los sectores de la actividad económica del país.
El dirigente nacional del tricolor, Humberto Moreira, ha destacado que estos energéticos han subido su precio 76 ocasiones en menos de cinco años de la gestión del presidente Felipe Calderón.
La dirigencia priísta estimó que el gobierno federal debe atender la demanda social y frenar dichos incrementos que afectan directamente al poder adquisitivo de las familias que ven reducido con cada incremento la posibilidad de satisfacer sus requerimientos más elementales.
En tanto, la bancada del PRI en la Cámara de Diputados explicó que contrario a lo que afirma ese organismo y el gobierno de Felipe Calderón, no existe ningún subsidio a las gasolinas y el diesel y que los incrementos de los precios de los combustibles obedecen a una política de venta barata de crudo e importación de refinados caros.
De acuerdo a un análisis de los precios de los combustibles al 17 de mayo, la gasolina Magna ha pasado de 6.74 pesos por litro a 9.16 (39.09 por ciento) en el sexenio de Felipe Calderón, y la Premium de 8.29 a 10.30 pesos (23.76 por ciento)
El documento, elaborado a partir de la petición de la OCDE par eliminar el “subsidio a las gasolinas” refiere que estos aumentos han contribuido en el aumento de 12.17 por ciento de inflación acumulada en lo que va del sexenio, mientras que el salario mínimo solo ha aumentado 22.86 por ciento.
El PRI aseguró que no se justifican los gasolinazos, porque el precio promedio de la mezcla mexicana de petróleo crudo de exportación se ha incrementado 71.23 por ciento.
Tanto la dirigencia nacional como diputados federal del PRI reaccionaron en contra de lo señalado la víspera por la OCDE relativo a cortar subsidio a gasolinas e insistieron en la urgencia de que se congelen los precios de la gasolina y el disel para disminuir la crisis económica que trae consigo el excesivo costo del transporte en prácticamente todos los sectores de la actividad económica del país.
El dirigente nacional del tricolor, Humberto Moreira, ha destacado que estos energéticos han subido su precio 76 ocasiones en menos de cinco años de la gestión del presidente Felipe Calderón.
La dirigencia priísta estimó que el gobierno federal debe atender la demanda social y frenar dichos incrementos que afectan directamente al poder adquisitivo de las familias que ven reducido con cada incremento la posibilidad de satisfacer sus requerimientos más elementales.
En tanto, la bancada del PRI en la Cámara de Diputados explicó que contrario a lo que afirma ese organismo y el gobierno de Felipe Calderón, no existe ningún subsidio a las gasolinas y el diesel y que los incrementos de los precios de los combustibles obedecen a una política de venta barata de crudo e importación de refinados caros.
De acuerdo a un análisis de los precios de los combustibles al 17 de mayo, la gasolina Magna ha pasado de 6.74 pesos por litro a 9.16 (39.09 por ciento) en el sexenio de Felipe Calderón, y la Premium de 8.29 a 10.30 pesos (23.76 por ciento)
El documento, elaborado a partir de la petición de la OCDE par eliminar el “subsidio a las gasolinas” refiere que estos aumentos han contribuido en el aumento de 12.17 por ciento de inflación acumulada en lo que va del sexenio, mientras que el salario mínimo solo ha aumentado 22.86 por ciento.
El PRI aseguró que no se justifican los gasolinazos, porque el precio promedio de la mezcla mexicana de petróleo crudo de exportación se ha incrementado 71.23 por ciento.
Fuente: La Jornada